Cómo actuar en zona hostil

Lucron es un país arrasado tras un conflicto bélico. Y hasta el se ha desplazado un contingente internacional para normalizar la situación y ayudar a la Policía del lugar a establecerse. Desde el cuartel general se irán distribuyendo las órdenes para solucionar los conflictos que vayan surgiendo como la llegada masiva de refugiados, el hallazgo de una fosa común que hay que desenterrar, revueltas en el campo de refugiados, problemas de orden público, asaltos al hospital de campaña, denuncias por violaciones, secuestros...

En este caso se trata de un caso práctico pero es la realidad que ahora mismo se vive en diversos puntos del mundo. Y para saber cómo tienen que actuar los agentes, estos días se está celebrando en Logroño un curso en el que están participando 200 agentes de cuerpos policiales gendármicos y civiles “y que están trabajando durante dos semanas en la resolución de una gestión civil de la crisis”, explica a Rioja2 el coronel de la UAR, José Antonio Iglesias Pollo.

Se trata de un curso internacional avalado por la Unión Europea y co financiado por la Comisión Europea. “El objetivo es formar a policías europeos y formar un contingente único y homogéneo que pueda trabajar junto en un país tercero para solucionar un problema de terrorismo o de estabilidad tras un conflicto como el que ahora mismo tenemos en Siria, que se pueda normalizar y tener un aval democrático”, asevera.

Así, durante dos semanas 200 agentes de toda Europa están participando en este curso que es “meramente práctico” aunque también ha habido una “importante parte formativa que se ha desarrollado en la Universidad de La Rioja”. Por la tarde, se han estado trabajando en los talleres en los que los agentes experimentan técnicas y “procedimientos de todos los cuerpos policiales con el fin de crear una doctrina europea”. Y en eso estamos, asegura el coronel, “en esa conjunción necesaria para afrontar este tipo de problemas”.

En esta segunda semana, el curso se ha centrado en un ejercicio de campo. Este contingente, relata, ya está en un país tercero, Lucron. “Un país post conflicto que hay que normalizar y apoyar a la policía del lugar a establecerse”. Hemos tratado de recrear situaciones lo más reales posibles y, de hecho prosigue, los agentes deberán enfrentarse y solucionar una llegada masiva de refugiados, desenterrar una fosa común, revueltas en el campo de refugiados, problemas de orden público, asaltos en el hospital, secuestros...

Dos intensas semanas durante las que “también ha habido tiempo para vender La Rioja” y, de hecho, “durante el fin de semana hicimos una chuletada y el domingo por la mañana fueron a visitar la bodega de Vivanco”.