Agentes de la Jefatura Superior de Policía de La Rioja han llevado a cabo la detención de un varón que poseía 18 reclamaciones por diferentes órganos judiciales para ser detenido e ingresado en prisión. Es un un varón de nacionalidad española, de 26 años de edad, nacido en Logroño. Posee 21 antecedentes policiales previos de diversa índoles, como robos con fuerza, amenazas, homicidio o desórdenes públicos.
Conocedor de las causas pendientes con la Justicia Española se habría desplazado hasta el país vecino, Portugal, para evitar ser detenido; sin embargo, recientemente se habría instalado junto a su pareja en la localidad de Arrúbal, en La Rioja y agentes investigadores pertenecientes a la Jefatura Superior de Policía de La Rioja se desplazaron hasta la citada localidad para llevar a cabo su detención.
En el momento de la detención, el ahora detenido, proporcionó datos de filiación falsos a los Agentes y empleó gran violencia para no ser detenido, por lo que se le acusa también de un Delito de Atentado a Agente de la Autoridad y un delito de Daños por los daños ocasionados en un vehículo estacionado en las inmediaciones de su vivienda.
Se estableció un dispositivo de localización para llevar a cabo la detención de este varón el pasado día 22 de agosto y fue ese mismo día cuando se consiguió localizarlo y por tanto llevar a cabo su detención. Los agentes actuantes observaron cómo el ahora detenido, salió de su vivienda y cuando se dirigía a su vehículo, le pidieron la documentación y este les manifestó que puesto que no la tenía en ese momento se la podía dar verbalmente.
Los agentes accedieron a su petición y este les proporcionó unos datos de filiación falsos, no se correspondían con los suyos, tanto el nombre como los apellidos. Puesto que los agentes reconocían sin ningún género de dudas a este varón, fueron conscientes del engaño del ahora detenido.
El joven se mostraba muy insistente en entrar al domicilio y mostraba una clara actitud huidiza y en un momento dado, propinó un puñetazo a uno de los agentes en el costado derecho provocando que este cayera de manera involuntaria encima de otro agente. En ese momento el detenido aprovechó para huir y comenzar a correr. Los agentes comenzaron a correr detrás de él y este les lanzó una cerveza que portaba en la mano. Lograron darle alcance a pesar de que este seguía braceando y forcejeando para intentar huir y no ser detenido. Pero una vez que fue interceptado, volvió a propinar otro puñetazo al agente y lo golpeó fuertemente a la altura del codo con la fachada de la vivienda, momento en el que el varón aprovechó para acceder a su vivienda cerrando la puerta de forma violenta.
Momentos más tarde, observan al varón saltar el muro de la vivienda, de más de dos metros de altura y caer al suelo de manera sorpresiva y emprendiendo su huída corriendo. Aunque los agentes lo interceptaron de nuevo y fue detenido en ese mismo momento. Durante esta intervención el ahora detenido provocó daños en un vehículo estacionado en las inmediaciones de su vivienda, golpeándolo con su mano derecha en el momento de la huída.
Además de pasar a disposición judicial por el gran número de reclamaciones vigentes, en ese mismo acto también se le acusó de un delito de atentado a agentes de la autoridad por el acometimiento y violencia ejercida en el momento de la detención y de un delito de daños por los daños materiales ocasionados en el vehículo estacionado.
Entre las funciones encomendadas a la Brigada Provincial de Policía Judicial se encuentra la localización de personas que se encuentran reclamadas por diferentes Órganos Judiciales. En este caso, el ahora detenido poseía 18 reclamaciones vigentes: 2 órdenes de detención e ingreso en prisión y 4 órdenes de detención y personación por diferentes Juzgados, así como 7 controles específicos y 3 averiguaciones de domicilio y paradero.