Logroño acogió este sábado una concentración contra “las leyes mordaza” LGTBI que contó con escaso seguimiento. Convocados por la Asociación para la Defensa de los Valores Católicos en la Enseñanza, ADVCE, protestaban contra las leyes, a su juicio “injustas”, contra la discriminación por orientación o identidad sexual, ya que creen que “atentan contra derechos fundamentales”.
Como han reconocido en su página web: “La pena es que éramos pocos para lo terriblemente grave que es el asunto”. Pese a ello, ADVCE considera que la concentración “transcurrió de manera satisfactoria. Cumplimos con nuestro objetivo de informar repartiendo dípticos y de mostrar rechazo a unas leyes injustas. La gente hacía fotos desde la calle. Usamos un megáfono y los medios también acudieron”, explican.
Además, han agradecido la colaboración y presencia de VOX y AES y de la Policía Nacional, “como garante del derecho de reunión”.
ADVCE lamenta que la legislación LGTBI permitirá que “un niño pueda entrar en el baño o vestuario de niñas si se siente niña, ya que debe ser tratado de acuerdo a su identidad de género. Esto choca frontalmente con los idearios propios de los centros de inspiración cristiana, forzando también la admisión de un alumno niño que sintiéndose niña quiera llevar el uniforme femenino”.
El autobús de Hazte Oír, también contra las leyes LGTB
Tanto Gylda como la Marea Arcoíris criticaron esta convocatoria e invitaron a la ciudadanía a hacer oídos sordos a este mensaje de odio, que “fomentan la discriminación hacia personas que ellos consideran diferentes”.