El jurado popular del caso Cornago declara culpable de un delito de asesinato por alevosía contra José Miguel Villodas, y tendrá que cumplir una pena de 18 años de prisión. El retén que asesinó a su compañero de trabajo de varios disparos con una escopeta de caza en un paraje de Cornago, tendrán que indemnizar a la familia de la víctima con más de 200.000 euros.
A María Esther Moreno Galán, esposa de la víctima, en cuantía de 139.492,60 € en concepto de daños y perjuicios, así como el las cantidades de 5.426,54 € por gastos de funeral y en la de 1.705 € por gastos de lapida.
A Clara y Adrián Lasheras Moreno, hijos del fallecido, en cuantía de 58.121, 91 €, a cada uno de ellos, en concepto del de perjuicios.
A José María las Heras Tejado y Angela Ramírez García, padres del retén asesinado, en la cantidad de 11.624,37 €, en concepto de perjuicios, y en favor de cada uno de ellos
Además se declara la responsabilidad civil subsidiaria de la Comunidad Autónoma de La Rioja.
Los ocurrieron el 21 de mayo de 2010 sobre las dos de la tarde. J.M.V.O se encontraba con otros compañeros del retén en el paraje conocido como El Borreguil, en Cornago. Según el fiscal, el acusado sacó un arma de fuego de una bolsa de deporte que se encontraba en el maletero de uno de los vehículos, se dirigió hacia F.LR y sin mediar palabra descargó cinco disparos sobre él. Como consecuencia, F.L.R sufrió la rotura de las arterias aorta e íliaco, lo que el provocó un shock hipovolémico, falleciendo minutos después.