La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha recogido el malestar de los profesionales de Atención Primaria y exige explicaciones a la consejera de Salud por sus recientes declaraciones públicas en las que “les señala como responsables de que los ciudadanos no reciban la atención que requieren”.
En este sentido, CSIF, que “ya ha pedido la dimisión de la consejera de Salud varias veces por su incompetencia para resolver los graves problemas de nuestra atención primaria, exige al Gobierno regional que le aclare las numerosas dudas sobre la eficiencia y modelo organizativo de su consejería que la señora Alba confiesa tener, en unas declaraciones públicas realizadas el pasado fin de semana”.
En dichas declaraciones, la consejera afirma que “lo que tenemos ahora es un modelo heredado”, refiriéndose a la situación “insostenible” de nuestra atención primaria. “De las pocas cosas en las que este sindicato está de acuerdo con la consejera”, ha indicado.
CSIF quiere recordar que ella y su partido llegaron al poder para arreglar el “desaguisado” de la sanidad pública, entre otras promesas electorales. Ahora lo más fácil es echar la culpa a otros y decir que todo se debe a la “complejidad organizativa” y que “hay que ver el conjunto y decidir cómo atender mañanas, tardes, noches, fines de semana, festivos, urgencias” ha explicado la consejera.
Unas afirmaciones que deja “a los pies de los caballos” a los profesionales de atención primaria, a los que prácticamente “se le señala como los únicos responsables directos de que los ciudadanos no reciban la atención que requieren”.
Algo que está causando “una gran indignación entre dichos profesionales que han estado meses y meses reclamando más recurso humanos y materiales, sin que estos llegasen”. Unos trabajadores que “han estado redoblando esfuerzos durante toda la pandemia y haciendo encajes de bolillos para poder atender todas las necesidades de este servicio y en todas aquellas acciones que se les ha pedido y mucho más”.
CSIF recuerda a la consejera, que “parece carecer de conocimientos y memoria, que estos profesionales estuvieron arriesgando su vida con déficit de equipos de protección durante el inicio de la pandemia y más allá”.
Cuando la consejera que “los centros de Atención Primaria tienen que volver a priorizar la atención presencial y estamos trabajando para que sea ya en abril”, lo que está haciendo es mostrar su desconocimiento absoluto de la realidad, ya que debería saber que los centros de salud no han estado cerrados, ya que han permanecido abierto en su horario habitual durante toda la crisis sanitaria.
“La señora consejera también parece desconocer que la Atención Primaria comprende los servicios de urgencias y emergencias sanitarias (SUAP y 061)”, ha indicado el sindicato.
Estos profesionales “han seguido las normas que se les han marcado desde la consejería para atender a los pacientes de la forma más segura frente al coronavirus, tanto de forma presencial como telefónicamente. Y, en muchas ocasiones redoblando esfuerzos y sacrificio personal, debido a la falta de personal y la gran cantidad de bajas por enfermedad, estrés y Covid que se han dado entre estos profesionales”.
Para este sindicato, el Ejecutivo riojano debe dejar de jugar a “poli bueno y poli malo”. Ya que mientras la presidenta de La Rioja elogia el comportamiento ejemplar de nuestros sanitarios, su consejera de Salud se empeña en darles “collejas al culparles de que los ciudadanos no reciban la atención que se merecen. Basta ya”.
CSIF exige a la consejera que “se aparte de sus obligaciones” y al Gobierno regional que “tire del exiguo banquillo que le queda” para dar una solución efectiva a la sanidad pública en general y a nuestra castigada Atención Primaria, en particular. Dicha solución pasa por “contratar personal sanitario suficiente de todas las categorías y poner a nuestra sanidad a la altura que tienen otras regiones de la Unión Europea, y que de respuesta a las indicaciones que se le hace desde dichas instancias, fundamentalmente en términos de porcentaje de profesionales por número de habitantes y necesidades de servicio para dar respuesta a una crisis sanitaria como la que estamos padeciendo, comenzando por incrementar el ritmo de vacunación”.