La Navidad ya está aquí, las calles se iluminan, la televisión nos inunda de miles de juguetes, turrones, polvorones, comienzan las cenas de empresa, con los amigos... todo nos indica que un año más la Navidad llega, casi sin llamar y nuestra casa debe recibirla como se merece. Fuera la pereza y cógele el gusto de nuevo si es que lo has perdido, con lo último en decoración.
Tanto si eres de los tradicionales como si no, hay ideas para todos los gustos.
El clásico Belén no deja de ser el rey de estas fechas. Aunque parezca que no hay demasiadas variaciones cada año surgen belenes más modernos con nuevos movimientos y hasta con nubes que llueven en el nacimiento como si fuesen de verdad dando vida a las inertes figuras.
Pero donde las tendencias son más cambiantes y caprichosas son en los adornos externos al inmortal Belén. El árbol es el protagonista pero no sólo el también mítico abeto. Si tenemos jardín podemos decorar con unas pequeñas luces monocromáticas alguno de nuestros árboles, preferiblemente en todos blanquecino o con suaves azules.
Lo mismo podemos hacer si tenemos un decorativo árbol dentro del hogar sin tener que recurrir a los árboles de siempre.
Si nos optamos por el abeto navideño podemos darle otro aire si escogemos las últimas propuestas. Los colores estrella esta temporada para decorar nuestro hogar son los dorados, negros y blancos así que el árbol blanco o negro será perfecto. Zara Home muestra claramente esta propuesta en su catálogo, impregnado de tonos dorados y negros.
Si elegimos el árbol blanco, unos toques de negro en sus adornos será perfecto al igual que si preferimos un especial árbol negro, al que adornos blancos o dorados harán de él un espectacular y elegante símbolo navideño. Podemos darle un toque de luz con lo nuevo para asentar nuestro árbol, unas alfombrillas con luces de leds, que iluminarán suavemente al protagonista de la época desde el suelo.
Pero hay más opciones, vestir nuestra casa con velas, candelabros de metacrilato o cristal, o luces que caigan en cascada dejando a un lado las típicas de mil colores... si combinamos todo en gamas de tonos suaves como el blanco podemos obtener un ambiente realmente agradable en estas fechas, sin abusar de colores y adornos excesivamente recargados. Los salones blancos son también los reyes de estas navidades dejando el color para las habitaciones de los niños a los que les ilusionará ver como cambia el aspecto de su cuarto en estos días tan especiales para ellos.
La mesa es algo que también requiere nuestra atención en esta época. Familiares, amigos, todos nos reunimos en torno a ella y por eso debe estar lo más cuidada posible sin pecar de “incomoda”.
Para los más comodones un apunte, en cualquier centro comercial o tienda especializada podemos encontrar mantelerías con todo el juego de platos, servilletas y vasos reciclables, es decir de papel y que una vez terminada la cena o comida, podemos tirar cómodamente (por mucha pena que nos de) sin tener que estar un buen rato recogiendo, lavando y guardando. Así nadie tendrá que sacrificar su descanso para tener la casa perfecta en un momento.
Muchas son las opciones para que nuestro hogar de la bienvenida a la fecha más especial del año, pero lo más importante, colores y formas a parte, es decorarlo con todo el cariño posible y si se puede en compañía. De esa manera no fallaremos en la decoración de nuestra Navidad.