La pasividad de la comunidad internacional ante el conflicto palestino-israelí y la política de asentamientos del gobierno de Israel, han motivado la última decisión del presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Mahmud Abbas.
Abbas ha anunciado su intención de no presentarse como candidato a las elecciones palestinas convocadas para el próximo mes de enero, confirmando así los rumores que apuntaban a esta posibilidad. “He informado al Comité Central de Al Fatah y al Comité Ejecutivo de la Organización para la Liberación de Palestina que no deseo presentarme a las próximas elecciones”, declaró en una comparecencia ante los medios de comunicación en Ramala (Cisjordania). “Espero que entiendan mi postura”, añadió el dirigente, que dejó claro que su decisión “no tiene propósitos tácticos ni de manipulación”.
El presidente palestino ha declarado que los palestinos y los israelíes, con el apoyo de la comunidad internacional, están “obligados [...] a luchar por la solución de los dos Estados”. “Hemos hecho grandes sacrificios, pero el gobierno israelí está adoptando una política que arruina todos los esfuerzos por la paz”, lamentó.
El pasado mes de octubre, Mahmud Abbas había convocado las elecciones de enero al no ser capaz de llegar a un acuerdo con el movimiento islamista Hamas, quien gobierna la Franja de Gaza. El dirigente se ha negado a reanudar las negociaciones de paz con Israel, como le pide Estados Unidos, porque cree que antes el gobierno de Benjamin Netanyahu debe frenar la expansión de las colonias en cumplimiento de la Hoja de Ruta pactada en 2003.
En el contexto de las conversaciones de paz, Netanyahu ha aceptado limitar temporalmente la construcción en Cisjordania, territorio que Israel tomó en la guerra de 1967, pero no va a congelarla totalmente, ya que, según él, Israel debe satisfacer la necesidad de “crecimiento natural” de las comunidades judías.
Sin embargo, Abbas también ha culpado a Hamas de frustrar todos los intentos de reconciliación entre las facciones palestinas
. “Primero Hamas se escudó en [el informe] Goldstone y luego puso otras excusas, y mientras seguía sin firmar el último documento para la reconciliación y mantenía sitiado a nuestro pueblo” en la Franja de Gaza, subrayó.
“¿No es hora ya de que los dirigentes de Hamas dejen de cooperar con agendas externas y presten atención a los intereses del pueblo palestino?”, se preguntó Abbas, que consideró que “con su política, Hamas provoca que mueran decenas de palestinos y fomenta el argumento de que no cuenta con un socio en el otro lado”. Abbas recordó el golpe de Estado que dio el movimiento islamista en Gaza en 2007 diciendo que “a pesar del dolor que causó”, se respondió al mismo con un “llamamiento a la unidad palestina”.
Ante la renuncia del presidente de la Autoridad Nacional Palestina, la secretaria de Estado de Estados Unidos, Hillary Clinton ha afirmado que trabajará con Abbas, independientemente de cuál sea su cargo.
Según ha asegurado Clinton, Abbas “ha reiterado su compromiso personal de hacer todo lo que pueda para alcanzar una solución de dos estados para el conflicto palestino-israelí”.
“Estoy deseando trabajar con el presidente Abbas en su nueva calidad”
, añadió. Sin embargo, hay que recordar que la postura de Estados Unidos con respecto al futuro acuerdo entre el gobierno de Israel y la Autoridad Nacional Palestina ha influido en la decisión de Abbas. El presidente palestino ha afirmado sentirse “sorprendido” por el hecho de que últimamente Estados Unidos se haya mostrado, a su juicio, más inclinado hacia Israel que hacia los palestinos, pidiéndole que firmará el acuerdo sin condiciones.
Una decisión no aceptada
Por su parte, el movimiento Al Fatah no acaba de aceptar la decisión de Mahmud Abbas y cree que la marcha del mandatario palestino puede perjudicar la estabilidad política de la región.
El portavoz de la facción, Fahmi Az Zarir, ha segurado en una entrevista a la agencia Maan que el presidente palestino estaba “preocupado y muy enfadado” por varias cuestiones internas de su partido, pero apuntó que el motivo principal de su decisión podría deberse a “la obstrucción de Israel en el proceso de paz” y su rechazo a poner fin a la construcción de asentamientos colonos en territorios palestinos.
“Creo que la comunidad internacional, especialmente Estados Unidos y la Unión Europea, deberían ser conscientes del daño causado a las negociaciones de paz
en los últimos cuatro años, al no haber conseguido ni uno de los objetivos marcados“, ha subrayado el portavoz de Al Fatah.
El movimiento de Abbas convocará una manifestación en Ramala en protesta por su decisión de retirarse de la política, a pesar de que éste advirtió en una comparecencia ante los medios de comunicación la localidad cisjordana, que no cambiaría de postura.
De acuerdo con el secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Yasser Abed Rabbo, Abbas sigue siendo el candidato preferido para los comicios de enero y anunció que el movimiento condenará su decisión.
“Es un asunto del comité”, aseveró Abed Rabbo quien contradijo las palabras de Abbas asegurando que finalmente sí participará en el proceso electoral representando no sólo Al Fatah sino también a cada miembro de la OLP.