Las fiestas navideñas y las tradicionales comidas y cenas familiares de estos días parecen estar haciendo olvidar la crisis económica, al menos para los que optan por no cocinar en casa y prefieren los platos y menús preparados, sector en el que la demanda se está manteniendo en cifras similares a las de años anteriores, según el responsable de la sección de platos preparados del centro de El Corte Inglés de Castellana, Ángel Trelles.
El número de encargos para Nochebuena y Navidad rondan los 400 menús, una cantidad habitual desde hace unos años, en los que la demanda de platos preparados creció considerablemente como consecuencia de la menor dedicación de tiempo y afición a la cocina, sobre todo por parte de los integrantes de los hogares más jóvenes.
Otro de los factores que han contribuido a mantener este año de mala coyuntura económica el número de encargos ha sido, en opinión de Trelles, los precios de los platos, que prácticamente no han variado respecto al año anterior, y se mueven en una horquilla de entre 14,95 euros por persona del menú más barato, hasta los 23,75 euros del más caro.
No obstante, existe la opción de que cada uno cree su propio menú seleccionando los platos entre todos los que se ofertan: cosas para picar, entrantes, pescados, carnes, guarniciones, y una gran variedad de postres.
Además, la oferta en estas fechas cambia prácticamente “un 80 por ciento” respecto a la carta habitual, incorporando platos típicos de esta época junto con otros más innovadores o que se han puesto “de moda”. Es el caso del capón relleno, que elaboran con pistacho y limón, y que ha incrementado su demanda este año respecto a otros productos más tradicionales, como el pavo relleno, cuya demanda ha descendido aproximadamente un 25 por ciento.
Otro de los productos a los que les han surgido más aficionados en los últimos tiempos, como ha podido comprobar Trelles, ha sido el pescado, debido al mayor culto al cuerpo o al incremento del interés por “cuidarse” en fechas tan dadas a los excesos. “Muchos prefieren pescado para cenar -por ejemplo, en Nochebuena- porque es más ligero”, indicó.
Sin embargo, las carnes siguen siendo “una parte importante del consumo”, y junto al pavo, el cordero o al cochinillo tradicionales se elaboran nuevos platos como la pularda, el capón o el pollo relleno, o el confit de pato.
PREVISORES Y COMPRADORES DE ÚLTIMA HORA
Para el departamento de platos preparados de este centro comercial, el “día fuerte” de ventas y público es la Nochebuena, aunque el goteo de peticiones y encargos comienza desde principios de diciembre y se intensifica a partir del día 23.
De hecho, muchos clientes prefieren evitar el día 24 para ir a comprar porque conocen de antemano la gran afluencia de personas que hay esa jornada, y deciden llevarse la cena completa o parte de la misma con un día de antelación.
Pero junto a este grupo de previsores, están los que deciden esperar hasta el último momento y se deciden por no cocinar al filo de la hora del cierre. “Tenemos gente durante todo el día, que vienen a recoger sus encargos o a ver los platos y elegirlos en el momento, y hasta última hora”, destacó.