No hay partido. Como era de preveer, los jugadores del C.D. Logroñés no se han presentado en el terreno de juego de la Estrella. La espectación era máxima, tanto por los curiosos, y aficionados como por los numerosos medios de comunicación que se han dado cita en esta fría tarde de domingo.
Después de 30 minutos de espera, que es lo que estipula el reglamento en estos casos, se ha dado el partido por terminado.
A la media hora, los jugadores han saltado al terreno juego, con su indumentaria, junto a los árbitros que, tras hacer el saludo inicial, han dado por finalizado el partido. Pero desde antes de las cuatro de la tarde ya se sabía que no se iba a jugar porque aunque el delegado del C.D. Logroñés, Fernando Noriega, se personaba en las instalaciones de la Estrella con las licencias de los jugadores, ya se había hablado con el Calasancio para comentarles que no jugarían. “Ya sabíamos que no iban a aparecer pero teniamos que esperar media hora de rigor. Esta es una situación que no gusta a nadie, y a nosotros a pesar de los tres puntos, no nos ha gustado ganarlos así”, nos ha explicado el propio entrenador del Calasancio, Nacho Ruiz. CONSECUENCIAS
: El Logroñés, según cita el artículo 105 de los estatutos que rigen la RFEF, se le da el partido por perdido por un 3-0 y se le resta tres puntos.
Y si la próxima jornada vuelve a no jugar el partido que le corresponda (en este caso ante el Berceo), el equipo blanquirrojo sería automáticamente eliminado y excluido de la competición.