El miedo y el caos se apoderan del San Pedro
Ya no hay gripe pero las Urgencias del Hospital San Pedro se siguen colapsando. Sin ningún argumento para excusarse como ya ocurriera en navidad, el Gobierno de La Rioja lo niega tajantemente y habla de normalidad absoluta, mientras periodistas de Rioja2 han constatado con sus propios ojos la saturación de un servicio reflejado en sus boxes, donde ayer se albergaban, otra vez, a dos personas por habitáculo. La situación de lo que el personal sanitario llama ‘el corralito’ (un lugar con un pasillo con un espacio para siete camas donde se ponen catorce, más ocho donde sólo debería haber cuatro) era desoladora. Cama con cama, sin espacio casi ni para un familiar. “A veces tenemos que desnudar y cambiar de ropa a los enfermos en el pasillo”, decía una auxiliar. Y esto, pese a la celeridad con la que comenzaron a darse altas después de que el PSOE denunciara esa misma mañana que había más de treinta pacientes esperando para ser ingresados, pero que no podían subir a planta por falta de camas.
La situación no es nueva, reconocían los trabajadores, quienes apenas se atrevían a hablar con los medios de comunicación delante de sus propios compañeros por miedo a ser delatados ante dirigentes afines al Servicio Riojano de Salud (Seris) y la Consejería de Salud y Servicios Sociales. Las presiones son terribles y el clima de trabajo se vuelve cada vez más insostenible, pese a que la atención brindada a los usuarios sea sobresaliente. Para dejar más camas libres en las que meter a los pacientes que esperaban en Urgencias y solventar la problemática por la vía rápida, incluso fueron suspendidas varias intervenciones quirúrgicas programadas para ayer (algunas fuentes apuntaban a más de cincuenta), después de horas de espera de asignación de cama. “Yo llevo trabajando aquí más de veinte años y no había conocido esto nunca”, confesaba otra sanitaria.
Esta saturación no se debe a que de repente todos los logroñeses hayan acudido en masa al San Pedro con alguna dolencia sino al cierre el pasado domingo, día 1, de un nuevo bloque de habitaciones de la tercera planta del hospital. En concreto del control 3ºB, que contaba con 23 camas. Se une este desmantelamiento a la zona de polivalentes, en la cuarta planta (control 4ºC), cuyos 22 cuartos están cerrados a cal y canto desde febrero. El Gobierno de La Rioja niega que haya clausurado ninguna habitación en los últimos días y sólo reconoce que las camas de polivalentes son las que no están operativas, lo que equivale a cerca del 5% de la capacidad del centro.
Según los datos facilitados por el Ejecutivo regional, la actividad en Urgencias subió anteayer más que en otros días, con un aumento de 50 a 65 pacientes atendidos en los boxes. “Lógicamente en el servicio de Urgencias ha habido más actividad de la normal y, por tanto, más trabajo, pero en ningún momento se puede hablar de caos”, señalaron. El secretario general del PSOE de La Rioja, César Luena, se desplazó ayer mismo hasta el hospital San Pedro para exigir la apertura inmediata de los controles que se han cerrado porque, dijo el socialista, “el servicio que se está dando es deficitario y lamentable para los ciudadanos”. “Durante esta mañana el caos se ha apoderado de nuevo de Urgencias. Se han dado situaciones dantescas para dar solución rápida a muchos pacientes, de una forma o de otra, para que no se explicitara lo que estamos viviendo aquí, que es un caos”, añadió.
Mientras el máximo dirigente del PSOE realizaba estas declaraciones a los medios de comunicación en el aparcamiento, un par de médicos se acercaron hasta el lugar para dar más detalles sobre la situación vivida esa misma mañana y en días anteriores en el hospital. Esto provocó que uno de los guardias de seguridad del centro sanitario se acercara también allí con el objetivo de identificar a esas personas, escuchar qué decían y ver la documentación que estaban mostrando a la prensa. Este mismo guardia ya había retenido momentos antes a una de las cámaras de televisión durante unos minutos, hasta que por radio le indicaron que podía grabar por fuera del edificio. El Hospital San Pedro, en Estado de Excepción.
Desde FSP-UGT criticaron a la Gerencia del Hospital por “una pésima gestión de los recursos humanos y materiales para atender la demanda hospitalaria sostenida en el tiempo”. Reclamaron también la inmediata apertura del control del 3º B para aliviar y mejorar el servicio de urgencias“, así como explicaciones de ese cierre de control ”incomprensible, ya que tras dos días el servicio de urgencias ya estaba totalmente desbordado“. El sindicato dijo que no entiende la prisa de la Gerencia por el cierre de plantas y que esta decisión responde ”a una cuestión puramente económica desatendiendo la necesidad del servicio“.
FSP-UGT le recordó a la gerente, Mª Luz de los Mártires, que su deber “es gestionar los recursos del hospital buscando siempre ofrecer un servicio sanitario digno a los ciudadanos y unas condiciones básicas de trabajo para el personal”. “Si estos no son los objetivos de la gerencia del Hospital exigimos su dimisión”, concluyeron.
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