“En verano –comenta la Dra. García Tormo - aumenta la afluencia del paciente adulto, tanto español como de países extranjeros- de entre 20 y 60 años, que se encuentra de vacaciones en la Costa del Sol. La razón por la que llegan a sufrir este tipo de patologías -continua- suele ser una relajación excesiva en cuanto a la adopción de medidas preventivas, como el uso de cremas solares, evitar prolongadas exposiciones al sol, precaución con ciertos alimentos, una correcta hidratación, no hacer excesos en la comida y en la ingesta de alcohol, o un mantenimiento de la medicación en los enfermos crónicos”.
Según explica la Dra. García Tormo, “durante los meses de verano, el número de pacientes que se atienden en urgencias se incrementa de manera notable, sobre todo en el mes de agosto”. “A lo largo del mes de julio de 2008 –destaca-, en nuestro servicio de urgencias atendimos a 4.098 pacientes, que ascendieron a 4.644 en el mes de agosto. Esto supone una media de 150 pacientes al día, cifra que se igualó durante el pasado mes de diciembre y que, probablemente, según observamos en nuestra evolución de los últimos meses, superaremos con creces este año.”
“La segunda quincena de julio y todo el mes de agosto, son los periodos de mayor afluencia”, concluye la especialista.
Precauciones a tener en cuenta
-Evitar exposiciones prolongadas al sol
-Evitar cambios bruscos de temperatura
-Utilizar cremas solares, gorros, gafas de sol y repelente de insectos
-Mantener una buena hidratación, ingiriendo mucho líquido
-Permanecer en sitios frescos durante las horas más calurosas del día
-Tener cuidado con los alimentos: lavar bien las frutas y verduras cuando se coman crudas, y tener precaución con las mayonesas y las tortillas
-Mantener una buena higiene en los oídos con productos específicos
Por último, es importante señalar que se debe prestar una atención especial a niños y ancianos