Hace tiempo que en el Partido Popular se viene gestando esta disyuntiva. Son muchos los sectores de la formación que lidera Mariano Rajoy que opinan que María Dolores de Cospedal debería renunciar al cargo de secretaria general en caso de vencer a José María Barreda el próximo 22 de mayo.
Lo que suceda ese día es de gran trascendencia pues Mariano Rajoy fijó como gran objetivo la presidencia castellanomanchega en su carrera a la Moncloa. Pero si esto sucede, algo que las encuestas dan como probable se encontraría con el problema de “compartir” a Cospedal en dos funciones como son la interna en la secretaría general del partido, y de presidenta de Castilla La Mancha.
En la Convención del pasado mes de septiembre algunos miembros destacados del PP instaron a Cospedal a replantearse su futuro, pero entonces ella dio un paso adelante asegurando que podía compaginar su papel como candidata regional con el de secretaria del partido. A ojos de algunos esta decisión no fue la más adecuada, aunque para ella su posición le sirve de parapeto para una mayor proyección pública de cara a sus votantes.
Y así ha sido hasta ahora cuando apenas restan dos meses para que se inicie la campaña electoral. Qué hara si consigue la victoria será una cuestión que tendrán que dilucidar con el presidente del Partido Popular.
Quién ocupará su cargo a partir de entonces si vence a Barreda y conquista el feudo socialista de momento está por ver, pero Ana Mato se perfila como su sucesora si es que Cospedal da un paso atrás.
La otra posibilidad es que pierda las elecciones en Castilla La Mancha, algo que no sería fácilmente digerible para el partido porque ha apostado fuerte por esta comunidad autónoma y la candidata regional se juega en ello gran parte de su futuro político.