El diputado autonómico del PP de La Rioja, Carlos Cuevas, ha denunciado el “atropello y atentado medioambiental” por parte de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), con el beneplácito del Gobierno de La Rioja, en los trabajos de construcción de una nueva defensa del Ebro para proteger distintos cultivos. “Maquinaria pesada está enterrando centenares de toneladas de residuos, de hormigón, ladrillo, uralita y plásticos, en un espacio que está reconocido como Reserva Natural y Reserva de la Biosfera, que forma parte de la Red Natura 2000”, ha lamentado.
Carlos Cuevas ha realizado estas afirmaciones hoy, día 21, junto al diputado y portavoz del Grupo Municipal Popular de Alfaro, Jesús Pérez Ligero, en el Sotillo de Alfaro (Sotos de Ebro).
Del mismo modo, ha lamentado el “silencio cómplice” del consejero Dorado y de la presidenta Andreu. “Hay que parar este gran atropello que convierte a esta zona en un vertedero de residuos, algo que no se puede consentir. Iremos hasta las últimas consecuencias para defender nuestro medio natural, así como la salud de todos los alfareños”. A este respecto, ha apuntado que “se está tapando con tierra residuos que pueden ser peligrosos apenas a doscientos metros de distancia del pozo de captación de agua de boca de Alfaro, que podría contaminarse”.
El Gobierno de La Rioja desmiente al PP
El Gobierno de La Rioja desmiente las palabras del diputado autonómico del PP de La Rioja, Carlos Cuevas, sobre la situación de residuos en el municipio de Alfaro.
El Ejecutivo considera “una absoluta irresponsabilidad preocupar intencionadamente a la población al poner en duda la calidad del agua en la ciudad de Alfaro, al mismo tiempo que lamenta que se genere alarma social con un tema tan sensible como la salud pública”.
En este sentido, han aclarado cual es la situación. Según explican, la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), al ejecutar la intervención de restauración integrada en la estrategia Ebro Resilience para la reducción del riesgo de inundaciones, descubrió residuos no peligrosos almacenados, durante años, en la zona de El Estajao.
Ante esta situación, la CHE, en coordinación y colaboración con el Gobierno de La Rioja, se moviliza y analiza los materiales encontrados. El análisis indicaba que se tratan de residuos inertes no peligrosos vía acuática que no son perjudiciales ni para la salud ni para el medio ambiente con el tratamiento adecuado.
“Tras la inacción de Ejecutivos anteriores, la CHE, de la mano del Gobierno de La Rioja, deciden retirar los residuos para facilitar la ejecución de la obra de Ebro Resilience y coinciden en depositarlos y sellarlos en un lugar seguro, que es lo que actualmente se está acometiendo”, señalan.
“Tras años de inacción de Ejecutivos anteriores, la CHE y el Gobierno de La Rioja han conseguido solventar esta situación”, defienden desde la Consejería de Sostenibilidad. El sellado se está ejecutando con arcilla, un material que favorece la impermeabilidad del terreno. Además, la intervención se está realizando aguas abajo de los pozos de captación de agua por lo que, a pesar de tratarse de residuos no peligrosos via acuática, nunca podrían entrar en contacto con el agua que se capta desde los pozos de la localidad.
Por todo ello, en el marco constante de colaboración entre administraciones, el Gobierno de La Rioja insiste en que es una prioridad garantizar la seguridad de los alfareños y alfareñas y el resguardo del medio ambiente y sus servicios. “La población puede estar tranquila porque su seguridad está garantizada”, aseguran.
Al mismo tiempo, “desde el Ejecutivo regional rogamos a representantes políticos no lanzar sospechas infundadas sin base científica o técnica que puedan alarmar a la población sin antes consultar las fuentes solventes. La responsabilidad ante la salud pública debe primar ante cualquier otro interés”.