Ni los hermanos Castro, Jesús y Quini; ni Jorge Meré ni Sergio Álvarez (futbolistas), ni Alejandro Rodíguez (peñista); ni José María Trabanco (socio número uno). El ganador del galardón 'Mañana saldrá el sol' ha sido la Escuela de Fútbol Mareo de Logroño que preside Bernando González y cuyo secretario es David Sierra -y auténtico galvanizador del club-. El premio lo otorga Unipes (unión de peñas sportinguistas) y ha querido reconocer la labor en el fomento de la entidad gijonesa, así como su tarea como embajadores del sentimiento rojiblanco lejos de Asturias.
De esta manera, las peñas que componen Unipes han valorado la labor, desde su fundación, de EF Mareo, puesto que se ha dedicado a educar y formar niños, no sólo en el plano deportivo, si no también inculcándoles los valores de entrega y espíritu de superación tan arraigados en el sportinguismo. Sin duda un espaldarazo a la dedicación realizada por este club afianzado en La Rioja y que trata de ser un aliado para que jóvenes riojanos puedan formarse junto a la metodología y valores que transmite en este caso un club de Primera División como el Sporting de Gijón.
En este sentido, el premio 'Mañana saldrá el sol', que ha alcanzado su quinta edición, busca reconocer a la persona o colectivo que, durante un período anual concreto o a través de una trayectoria, haya contribuido con su sportinguismo a hacer más grande el nombre del equipo rojiblanco. De esta forma, el ganador es elegido por votación de las peñas asociadas a Unipes y será entregado durante la celebración del día de las peñas sportinguistas. Desde ya, la Escuela de Fútbol Mareo de Logroño se une a un palmarés que inauguró Manolo Preciado y del que forman parte nombres ilustres y referentes del Sporting de Gijón, como Quini, Alejo Caso o Abelardo.
En cuanto al EF Mareo en la actualidad cuenta con siete equipos (benjamín primer y segundo año, alevín primer y segundo año, infantil, primera cadete y juvenil nacional) y “bajo el espíritu de la solidaridad y la convivencia entre los pueblos” surgió “este embrión del hermanamiento entre dos ciudades: Gijón y Logroño”, como queda expresado en la página web del club. Asimismo, en “nuestro anhelo de formación, el que va más allá del rectángulo de juego, en el ánimo de que así sea el espíritu que les acompañe luego en la vida, ya como adultos”. Quizá por esos valores ha recibido un galardón del que este club riojano, aunque perteneciente al Sporting de Gijón, debe sacar pecho.