El público del Palau da alas a un Fraikin BM Granollers que lo intentó todo pero que no pudo con el FC Barcelona Borges (25-30). Espectacular ambiente el que se vivió en el derbi catalán de la Copa.
Más de 5.000 aficionados llenaron el Olímpico de color vallesano dando alas a un equipo que, en algunos momentos, llegó a acariciar la victoria pero que se bloqueó en los compases finales y acabó cediendo ante un FC Barcelona Borges muy sólido y que concedió pocos errores. Una victoria blaugrana por 25 a 30 que cierra el cuadro de semifinales de esta XXXIV Copa de S.M. el Rey 2009.
Cinco mil voces en una sola
La entrada en pista del Fraikin BM Granollers ante más de 5.000 aficionados fue uno de los momentos más emocionantes de esta XXXIV Copa del Rey 2009. Ante su público el conjunto de Lorenzo Rueda empezó jugándole de tu a tu a un FC Barcelona Borges que prescindió, en la mayoría de minutos de juego, de su hombre de referencia, Iker Romero. Los primeros minutos de juego fueron un toma y daca entre dos equipos que se conocen mucho y entre los que existe una evidente rivalidad.
El FC Barcelona Borges empezó mandando en el marcador con ligeras ventajas de un solo gol. Los de Rueda se mantuvieron fuertes aunque la fiereza en ataque de Hansen, que acabó con 6 goles, y el acierto de hombres como Victor Tomás o Laszlo Nagy, ambos con 4 dianas parecieron trastabillar la confianza local.
Así a 10 minutos del final el Barça se marchó de dos y sembró las dudas ante un Fraikin BM Granollers que no encontraba huecos para el lanzamiento y que comprobaba como hombres de la talla de Raul Campos o Aleks Svitlica no tenían su dia. De hecho Rueda optó por sentar a Svitlica y buscar otras soluciones y así el conjunto de casa consiguió recortar la diferencia y llegar al descanso con una desventaja de solo un gol, 12 a 13.
El Fraikin BM Granollers se bloquea en el tramo final
El inicio de la segunda parte fue esperanzador para el equipo de Lorenzo Rueda que empató el partido a 15 y consiguió en la siguiente jugada ponerse por delante por primera vez en todo el partido. Fueron los mejores momentos de un equipo que, empujado por su afición, creyó que podía colarse en las semifinales.
Fueron momentos complicados para los blaugrana que volvieron a hacer rotar su banqueta para solucionar la situación y en un abrir y cerrar de ojos darle la vuelta al marcador. Así los hombres de Pascual se marcharon de tres y los de Rueda empezaron a bloquearse en ataque. Fue entonces cuando Fredrik Ohlander apareció para volver a resucitar la esperanza local con sus paradas pero el desacierto ofensivo de los de Granollers acabó por sentenciar sus opciones.
Cuanto más lo intentaban los de Rueda menos conseguían su objetivo y cuando sus ataques terminaban en pelotas pérdidas o en las manos de Hvidt aparecía el oficio del Barça para rematar la faena y abrir un hueco casi definitivo en el marcador.
Los de Pascual se fueron de seis a cinco para el final y eso acabó por desarmar a un Fraikin BM Granollers que hacia unos minutos que veía la remontada muy cuesta arriba.
Al final el Barça sentenció con el 25 a 30 que los clasifica para semifinales.