El Sevilla sufrió una dolorosa derrota (2-0) frente al Villarreal en El Madrigal, que complica sus aspiraciones europeas y volvió a ofrecer una pobre imagen en el estreno de Antonio Álvarez como técnico, mientras que el Getafe logró un valioso triunfo (1-3) en La Coruña, en los partidos correspondientes a la vigésimo novena jornada de la Liga BBVA.
El equipo hispalense no dio muestras de mejoría frente a los levantinos y fue superado en todas las facetas del juegos. El conjunto de Juan Carlos Garrido, que apostó por tres delanteros con Nilmar, Rossi y Llorente, supo aprovechar las facilidades concedidas por la indolente defensa andaluza y cosechó su ventaja en la primera mitad.
Rossi, en el minuto cuatro, aprovechó una contra de los castellonenses para marcar el primer tanto del partido. Apenas diez minutos más tarde, Llorente aprovechó un error de Palop para sentenciar el partido. Aunque el Sevilla trató de reaccionar en la segunda mitad, la falta de profundidad y los aciertos de Diego López impidieron la reacción de los hispalenses, que bajaron los brazos y recibieron el tercer tanto de Pires.
EL GETAFE SE ACERCA A EUROPA A COSTA DEL DEPORTIVO
Por otro lado, el Getafe volvió a engancharse a los puestos europeos tras su victoria a domicilio, en un campo donde nunca había ganado, frente a un flojo Deportivo de La Coruña que dio su tercer paso atrás consecutivo en sus aspiraciones para acceder a competiciones continentales.
Dos goles del venezolano Miku y uno en propia puerta del portugués Zé Castro fueron suficientes para doblegar a los gallegos. El conjunto de Miguel Ángel Lotina fue incapaz de mostrar peligro en ataque y concedió demasiadas ocasiones en defensa. Ricki acortó distancias con un brillante cabezazo, pero los deportivistas fueron incapaces de superar su apatía frente a un concentrado Getafe.
En el duelo del descenso, el Valladolid se hundió un poco más y fue goleado (3-0) por el colista, el Xerez, que volvió a demostrar que todavía no se ha rendido esta temporada. Víctor Sánchez y Míchel encarrilaron el encuentro en la frente a un inoperante equipo pucelano. Además, los de Onésimo sufrieron la expulsión de Villar, que derribó Mario Bermejo en un penalti y fue expulsado. Mendunjanin tuvo que acabar el partido en la portería y Bermejo puso el 3-0 definitivo.
En el Reyno de Navarra, Osasuna dio un importante paso hacia la salvación con el triunfo (1-0) frente al Almería, gracias al solitario gol de Pandiani, que regresó al equipo tras su lesión. Los navarros fueron superiores a los almerienses, pero sufrieron más de la cuenta tras desaprovechar sus ocasiones e incluso fallar un penalti por parte de Nekounam.
Por último, Espanyol y Sporting de Gijón no pasaron del empate (0-0) en un aburrido encuentro en el que ambos conjuntos carecieron de ambición para lanzarse al ataque. El fútbol plano y previsible de catalanes y asturianos dejó un justo resultado, que no sirve a ninguno de los dos equipos pero les mantiene alejados de las últimas plazas.