Este domingo, 10.30, el Sporting se juega en 60 minutos la posibilidad de ascender a División de Honor. De haber vencido a Morvedre, el anfitrión, en el segundo partido de la liguilla de la fase de ascenso ya estaría en la máxima categoría, pero al ceder ante las saguntinas por 17-15 -pese al 6-10 al descanso favorable para las riojanas-, las chicas de Luismi Ascorbe se jugarán sus opciones en la última jornada. Enfrente estará Alcobendas, que este sábado venció a Cleba León (24-20) y que cuenta con los mismos puntos que las logroñesas. En este sentido, las tablas favorecen al Sporting al contar con un +9por el -1 de las madrileñas.
El que ya celebra el ascenso es Morvedre. Dos triunfos en dos partidos que le permiten llegar a la jornada dominical con los deberes hechos. Por algo es el único invicto esta temporada. Y eso que el Sporting La Rioja, durante muchos minutos, fue por delante en el marcador. Pero en un duelo de grandes defensas se impuso el cuadro que tuvo mejor ataque en determinados momentos. De hecho, el 3-2 a los 11 minutos ya se empezaba a sospechar que el encuentro iba a ser áspero.
Pero un soberbio parcial de 0-7 para el Sporting La Rioja hizo saltar las alarmas en las locales. Masha, con 4 goles (acabó con 5), lideraba a las suyas, pero Irati, con sus 3 tantos, ponían a las riojanas más cerca del ascenso. Tocó volver a la realidad. Hasta el descanso fueron 7 minutos muy productivos para las de Sagunto que se aferraron a su pista. El 6-10 en el ecuador daba una ventaja significativa para las de Luismi Ascorbe, pero su ataque se atascó en exceso, puesto que en la siguiente media hora sólo anotaron 5 goles. Muy pocos para querer ascender.
Mediado el segundo tiempo Morvedre ya estaba en el choque. Empate a 12 que ponía cuesta arriba las aspiraciones de un Sporting al que se le encogía el brazo. Al menos, la actitud defensiva era muy buena, por lo que todo se iba a decantar por pequeños detalles. Las de Manu Etayo estaban un punto por encima. Venían de ver imposible el partido y ahora atisbaban el ascenso. Se lanzaron a por él. Restaban 4 minutos y las riojanas no le perdía la cara con el 16-14 adverso. Costaba mucho marcar. Tanto que las riojanas cedieron ante el empuje de las saguntinas. Era importante, pese a la derrota, no irse por el asunto de los goles, ya que pueden ser claves para el ascenso. El 17-15 final permite a las logroñesas firmar las tablas ante Alcobendas. Si el club quiere estar en División de Honor no se puede perder.