Las principales causas de defunción entre la población total de La Rioja son las enfermedades del sistema circulatorio, los tumores, las enfermedades del sistema respiratorio, las del sistema nervioso y las causas externas, según el último estudio de la Consejería de Salud sobre esta materia.
Este estudio, elaborado por la responsable del Registro de Mortalidad de La Rioja, María Natividad Izco, alude a la mortalidad en la comunidad riojana durante 2005, año en el que se registraron 2.865 defunciones, de las que 1.528 correspondieron a hombres y 1.337 a mujeres.
La mortalidad debida a esas cinco principales grandes causas supone, en los hombres, el 85 por ciento sobre el total de las muertes y, en las mujeres, el 78.
El infarto agudo de miocardio es la principal causa específica de muerte entre los hombres de La Rioja, con una tasa de 86 por cien mil; mientras que, en el caso de las mujeres, es la enfermedad cerebrovascular.
El informe añade que el tumor maligno de pulmón es la segunda causa específica de mortalidad en los hombres, seguida de las enfermedades cerebrovasculares y de la enfermedad pulmonar obstructiva crónica.
Las principales causas de muerte en las mujeres, tras las enfermedades cerebrovasculaes, son la insuficiencia cardiaca, el infarto agudo de miocardio, otras enfermedades de corazón y la enfermedad de Alzheimer.
También se resalta que la tasa de mortalidad infantil en La Rioja, durante el periodo estudiado, ha sido de 6,59 por mil nacidos vivos.
Las causas de mortalidad infantil por grandes grupos han sido las afecciones originadas en el periodo perinatal, en un 61 por ciento de los casos; las malformaciones congénitas, en un 21; y la muerte súbita, en un nueve.
Se especifica que, en el grupo de las afecciones originadas en el periodo perinatal, las causas específicas más frecuentes han sido los trastornos relacionadas con la duración de la gestión y el crecimiento fetal, con un 35 por ciento; y el feto y recién nacido afectados por complicaciones de la placenta, del cordón umbilical y de las membranas, con un veinte.
Este estudio determina que la esperanza de vida al nacer en La Rioja ha sido de 81,18 años; mientras que en las mujeres es de 84,45 y de 78,02 en los hombres.
Las tasas de mortalidad para ambos sexos en los primeros años de vida son inferiores al uno por mil y, a partir de los treinta años, esas tasas ascienden de forma paulatina; aunque se aprecia una sobremortalidad masculina a partir de los quince años.
La tasa global de mortalidad en La Rioja para este año fue del 10,35 por mil habitantes, con una tasa específica en hombre de 11,08 y, en mujeres, de 9,64; mientras que la tasa ajustada por edad fue de 7,86 por mil habitantes para hombres; de 4,24 para mujeres y de 5,85 para ambos sexos.