Carlos Pouso (Leioa, 30-07-60, 63 años) afronta su primera campaña completa al frente del Calahorra. Tras su llegada en enero no pudo evitar el descenso, pero en junio, renovó su contrato para dirigir a los riojabajeños en 2ª Federación y, además, absorbió las labores de director deportivo.
En medio de la tercera semana de pretemporada, el técnico rojillo atiende a Rioja2.
¿Qué tal llevas lo de ser entrenador y director deportivo?
Es una faceta que ya conocía, tampoco me ha sorprendido mucho. Más dedicación en el verano, que como entrenador deberías dedicarte a descansar pero, como director deportivo, tienes que estar al pie de cañón y sin vacaciones. Porque no tiene sentido ir a pagar un apartamento o un hotel para estar todo el día hablando por teléfono y no poder disfrutar. Entonces bueno, sarna con gusto no pica. Estoy fresco, no tengo problema.
¿Cómo ves a los chicos tras los primeros días de pretemporada?
Bien, los chavales de ahora vienen todos preparados, no es como antaño. Antes solíamos venir con kilos de más, un poquito dejados… También es cierto que había menos vacaciones que ahora. Ahora son más largas. Da tiempo a todo, para desconectar 2 o 3 semanas, y luego ya empieza todo el mundo a hacer cosas. Vienen con mucho terreno ganado, esa esa la realidad. En ese aspecto, sin problema de peso ni de nada.
¿Qué ha pasado con Aitor Pérez? Ha rescindido con el Calahorra para volver a firmar con el Alfaro…
No ha habido nada. Al final el chaval intuía que iba a tener pocos minutos y pidió su salida. Tenía ofertas de fuera y al final, curiosamente, se ha inclinado por el Alfaro. Y aquí yo no tengo problema, no ha habido nada raro. Él pensaba que no iba a ser titular y quiere jugar, yo lo he entendido perfectamente.
¿Esperabas que, a parte de Miguel Martínez, algún jugador más se quedara esta temporada?
No, de hecho, no hemos hecho ni oferta, por dignidad. Cuando el presupuesto se baja a la mitad, los sueldos bajan a la mitad, también. No tiene sentido. Todos han tenido ofertas de 1ª Federación u ofertas importantes de otros grupos, incluso de dos años de duración. Me alegro mogollón, porque a mí me ayudaron muchísimo, dieron la cara y siempre voy a estar agradecido a todos ellos. Es más, a muchos les he ayudado yo a buscar equipo. Para nada me ha supuesto un disgusto.
Sí que ahora, en pretemporada, notas que el haber tenido a 4 o a 5, el trabajo hubiera sido diferente. Al final al venir todos nuevos y de diferentes sitios, digamos que me sobran los amistosos. Lo que tenemos que hacer nosotros es entrenar y conocernos entre nosotros mismos. Llevo mal lo de los amistosos, no me gustan. Cuando tienes terreno recorrido y una base estructural del año anterior, no te importa, porque los chavales se relajan en esos partidos… Lo que tenemos que hacer ahora es entrenar mucho y competir poco, esa es la realidad.
Fotos: Twitter (@cdcalahorra)
Tienes 18 jugadores en el primer equipo, ¿qué y cuántas piezas te faltan?
Un par de ellas. En ningún caso vamos a ir a 22 jugadores, ni a rellenar las fichas senior. Sólo tengo 12 fichas senior, en ningún caso vamos a rellenar las 16, imposible.
Imagino que el empezar desde cero una temporada es más tranquilo que cuando viniste en enero…
Por supuesto. Al final es lo mismo, es entrenar y tratar de convencer a los futbolistas de lo que son capaces. Ahora sí que he tenido más protagonismo del que pude tener a la hora de confeccionar la plantilla, dentro de las posibilidades económicas de las que disponemos. Que tampoco son amplias, pero en ese aspecto bien, estoy contento.
¿Te fijas un objetivo para este año?
Hacer un equipo reconocible y que compita. No se puede marcar un objetivo con 18 nuevos, es imposible. Es vender humo y en ningún momento voy a caer en eso. Tengo muchos años para decir bobadas. Vamos a tener que ser un equipo reconocible, competitivo. De momento, toca armar el puzzle y, a partir de ahí, ir mejorando en el día a día, compitiendo y, luego, el verde es un juez que nunca se equivoca. Para qué vamos a vender mentiras, que es lo que mucha gente hace, sin más. El tiempo te va a decir el objetivo que tienes que tener. Sería que cada 15 días nuestra gente salga contenta de La Planilla, o sea, aprobar la asignatura que el año pasado no aprobamos, la de ser un equipo solvente en casa.
Pero, es que este año hay tantas asignaturas pendientes… No nos podemos dedicar sólo a una, para nosotros todas las asignaturas son nuevas este año. No hay una asignatura sola para aprobar, tenemos que aprobar todas, si no, no pasamos de curso.
La temporada pasada comentaste que si te quedabas en el Calahorra era porque podías pelear por estar en los puestos de arriba. ¿La sensación es la misma? ¿Estar arriba?
No, no nos fijamos el objetivo de estar arriba. Nos fijamos el objetivo de ganar el primer partido a la Mutilvera. Ese es mi único objetivo a día de hoy, sinceramente, llegar en las mejores condiciones al primer partido y poder ser capaces de ganarlo. No vamos a empezar a correr cuando todavía no sabemos ni andar. Vender humo no me gusta. Es que, no es vender humo, es mentir y yo voy con la verdad por delante.
¿Qué mensaje le das a la afición para que se ilusione este año?
A la afición lo único que le puedo prometer es que vamos a intentar que se sientan orgullosos del equipo que van a ver, que nos vamos a dejar la piel por ello, así de claro. Me gustaría ver vibrar a las gradas de La Planilla, no hablo de cantidad de gente, hablo de que transmitamos lo que a ellos les guste para que salgan satisfechos del estadio cada 15 días. Nos vamos a dejar la piel, eso te lo aseguro.