El Gobierno de España ofrecía la semana pasada el retraso del cierre de las centrales nucleares, entre las que se encuentra Garoña, que va a cumplir 40 años. Se trataba de otro retraso si se llega a pactar las pensiones de los 1.000 trabajadores entre puestos directos e indirectos. Garoña no ha dejado de ser un tema prioritario en la actualidad del país y de La Rioja. Ecologistas en Acción La Rioja siempre se ha posicionado en contra de alargar la vida útil de esta central cuyo cierre se plantea para 2013, y ya se ha convertido en la central más vieja y peligrosa del Estado. Ubicada a escasos 35 kilómetros de Rioja Alta, afecta directamente a la población de Haro y su comarca, 50.000 riojanos podrían estar en peligro en caso de accidente.
El Gobierno planteaba la semana pasada a los sindicatos una ampliación de la vida útil de las centrales nucleares. La oferta se centraba en mantener unos 1.000 empleos a cambio de acercar posiciones sobre una reforma que afectará a varias generaciones. Una propuesta que rechazaron tanto UGT como CC.OO. Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo rechazaban al día siguiente de la propuesta cualquier pacto que implicase vincular la edad de jubilación con la prolongación de la vida de las centrales nucleares.
¿Qué opinan de este asunto los colectivos ecologistas? La Coordinadora contra Garoña, Concha Hernani, comunica a este medio las sospechas del colectivo sobre este “giro” del Gobierno de España, y denunciaba la persecución en el último año contra su causa. Por todo ello, se reafirma en su postura de exigir el cierre inmediato de esta central nuclear, y de continuar su tarea de divulgación y sensibilización social y presión sobre la clase política sobre de los impactos ambientales y los riesgos de esta instalación.
Concha, ¿Cuál es vuestra postura?
“Para nosotros es absolutamente deplorable el giro del Gobierno de España. Consideramos que tanto UGT como CCOO tienen que defender los intereses de los trabajadores y la creación de puestos de trabajo, y se consigue a través del apoyo a las energías renovables y no, a favor de los intereses de la industria nuclear”.
¿Un giro sorpresa por parte del Gobierno de España?
“El giro se viene vislumbrando en contra de las promesas electorales, desde hace mucho tiempo. Primero permitiendo el alargamiento de la vida útil de la central nuclear de Garoña hasta el 2013, cuando tenían una oportunidad de oro para haberla cerrado este año. Y segundo, tras el nombramiento a principios de año, de un nuevo Secretario de Estado para la energía, Fabricio Hernández, que nos hizo sospechar que realmente se estaba cociendo un giro bastante pronuclear por parte del Gobierno, puesto que esta persona ha defendido siempre los intereses de la industria, trabajaba como perito en la consultora, y firmó el pasado mes de marzo el informe que Nuclenor, compañía propietaria de Garoña, que usó para exigirle al Gobierno 952 millones de euros por el cierre de esta central. Creemos que está absolutamente amortizada a partir de los 25 años de existencia, por lo cual, ahora que cumple 40 años tiene más que beneficios”.
¿No habéis tomado medidas legales al respecto?
“Llevábamos un tiempo pensando en denunciar las posibles incompatibilidades legales de este nombramiento, y ahora que se están confirmando las sospechas, creemos que no es la persona más adecuada para estar dentro del Ministerio de Industria en un puesto de tal importancia. Es una persona que exclusivamente está defendiendo los intereses de la industria nuclear en contra de los intereses de los propios ciudadanos. Nos parece que es absolutamente increíble la apuesta por el alargamiento de la vida útil de las centrales nucleares, y nos parece que dado el poder energético no se tiene que negociar a puerta cerrada, excluyendo al resto de los agentes como son las organizaciones ecologistas que tanto peso tenemos en este país e incluso hemos elaborado planes energéticos alternativos”
¿Qué vais hacer a partir de ahora?
“Estamos trabajando en equipo para realizar acciones de protesta, para pedir a los sindicatos que no entren en este juego, que el potencial de la energía nuclear en comparación con el que tienen las renovables es ínfimo, desde el punto de vista sociolaboral es una fuente de energía que menos empleo genera por unidad productiva, y en las energías renovables el ahorro y la eficiencia son los únicos recursos energéticos limpios. Además, informes de sindicatos, como CC.OO así lo avalan. Esto sería desde luego algo muy contestado, ya que no vamos a consentir que se lleve a cabo la prolongación de Garoña y la apuesta de alargar las centrales en contra de las energías alternativas y del ahorro energético. Es la única opción que nosotros tenemos, apoyar esto sería apoyar los modelos que nos han llevado a esta crisis económica. Más de lo mismo... y peor”.
ATAQUE A LA LIBERTAD DE EXPRESIÓN
En cuanto a la persecución que este colectivo viene sufriendo en el últomo año, un ejemplo de ello es que los músicos de la 'Orkresta Nacional' van a ser juzgados en Villarcayo (Burgos) el próximo 25 de enero. Todo se remonta a la marcha anual contra la nuclear de Garoña del pasado septiembre, en donde la Guardia Civil denunció a los músicos por la representación de unas canciones de los años 80. La Coordinadora contra Garoña denuncia que se trata de “un ataque a la libertad de expresión” y que espera que todo quede en “un susto desagradeble”. En el concierto se tocaron canciones como 'Las Fuerzas de Seguridad', del grupo 'Vómito', 'Las Sociedades Mueren Pero la Policía es Eterna', 'Cucarachas' o 'Más madera'. Al parecer, la Guardia Civil que custodiaba la central nuclear “no debió gustarle la interpretación”, y decidió denunciar a tres músicos, una persona ajena al grupo y al organizador de la marcha.
Más allá del despropósito que supone denunciar la interpretación de unas canciones perfectamente legales y compuestas hace más de 25 años, la Coordinadora contra Garoña entiende esta denuncia como un ataque a la libertad de expresión “absolutamente injustificado y fuera de lugar”. Por eso quiere manifestar públicamente su plena solidaridad con las personas denunciadas y hace un llamamiento para acudir al juicio de Villarcayo a hacer patente esta solidaridad.
“Pero además entendemos que es una forma de presión contra la propia Coordinadora contra Garoña y la Marcha a Garoña, que cada año se ve sometida a una presión policial mayor” apunta. “Desde un despliegue policial desmesurado y desproporcionado, controles injustificados a los asistentes… hasta actos tan estrambóticos como solicitar la documentación de un burro y su transporte, que habían participado este mismo año en una parodia contra el cementerio de residuos nucleares”. Consideramos intolerable esta actitud represiva frente a una oposición social razonada y justificada y una movilización totalmente pacífica“ apuntan.