El PSOE ha sufrido su mayor descalabro electoral en unos comicios regionales y su derrota en todas las comunidades, incluidos sus feudos de Extremadura y Castilla-La Mancha, ha pintado de azul el mapa autonómico.
Los socialistas de José María Barreda no han logrado mantener Castilla-La Mancha, donde María Dolores de Cospedal, también secretaria general del PP, gobernará con mayoría absoluta al haber conseguido 25 de los 49 escaños de las Cortes regionales. El PSOE sí podrá gobernar Extremadura si Guillermo Fernández Vara consigue el apoyo de los tres diputados que ha logrado Izquierda Unida, que por primera vez entra en la Asamblea.
También Aragón podrá contar con una presidenta socialista, Eva Almunia, pero dependerá del PAR, que con sus siete escaños se convierte en la llave para la formación de Gobierno. Y es que los 30 escaños logrados por el PP son los mismos que la suma de los 22 del PSOE, los 4 de la Chunta y los 4 de Izquierda Unida.
Pendientes también de los futuros pactos en Asturias, Navarra y Canarias, el PP que ha sido el partido más votado en todos los territorios, salvo en la Comunidad Foral y en el Principado, gobernará sin problemas en Baleares, Cantabria, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Comunidad Valenciana, Madrid, Murcia y La Rioja, además de en las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla.
Lo que sí está claro es que la alianza PSOE-IU que ha gobernado Asturias varias legislaturas no podrá reeditarse porque la suma de los escaños obtenidos por ambas fuerzas políticas (19) es insuficiente (el parlamento regional cuenta con 45 asientos). Todo está abierto también en Navarra, donde UPN se mantiene como fuerza más votada, con 19 escaños, por delante del PSN-PSOE, con 9; Nabai, con 8 y PP, con 4. La coalición abertzale Bildu irrumpe en el Parlamento navarro al lograr siete escaños. La candidata de UPN, Yolanda Barcina, ha hecho un llamamiento al resto de los partidos para impedir que Bildu sea la llave de cualquier gobierno.
También en Canarias los resultados no aclaran quien gobernará las Islas, ya que aunque el PP ha obtenido el mayor número de votos no llega a la mayoría absoluta y, al 85 por ciento del escrutinio, empata a 21 escaños con CC.
José Ramón Bauzá gobernará cómodamente Baleares con sus 35 diputados en un Parlamento de 59 escaños, en tanto que Ignacio Diego se convertirá en el próximo presidente de Cantabria al obtener el PP la primera mayoría absoluta en la región desde 1983. Francisco Camps ha revalidado su mayoría en la Comunidad Valenciana e, incluso, ha ganado un escaño (55), mientras que los socialistas de Jorge Alarte han perdido cinco diputados (33). Tampoco han tenido problemas para mantener sus mayorías Esperanza Aguirre en la Comunidad de Madrid, Juan Vicente Herrera en Castilla y León, Ramón Luis Valcárcel en Murcia y Pedro Sanz en La Rioja, así como Juan Jesús Vivas en Ceuta y Juan Jose Imbroda en Melilla.