Hasta que el físico aguantó. Hasta ahí llegó un Naturhouse valiente durante el primer tiempo, que no dudó en buscarle las cosquillas al poderoso Barcelona e invicto en Asobal desde ya ni se sabe. El resultado final, el 28-39, los 11 goles de diferencia evidencian que pese a que los catalanes también acudían a la cita con ausencias, las bajas locales eran más determinantes. Con este triunfo, los de Xavi Pascual ya pueden empezar a celebrar el título, por si había dudas. Sin duda, el duelo será recordado porque fue el último partido de Cristian Malmagro como franjivino en el Palacio, ya que a partir de enero se marchará a Arabia Saudí. Un jugón que echará de menos Jota González y el aficionado.
Con movilidad sin balón y con fluidez en la elaboración, el Naturhouse hizo frente (10-10, minuto 14) después de un arranque vertiginoso con velocidad y un ritmo endiablado, algo que beneficiaba a los blaugranas. Los catalanes buscaban transiciones raudas en cuanto encajaban gol. De esa manera, el marcador era un continuio vaivén. Las ventajas siempre eran de los pupilos de Xavi Pascual, que veían portería con facilidad (6 tantos en los primeros 5 minutos). Pero el Naturhouse no se arredraba. Al contrario.
Ángel Fernández, como finalizador, mantenía a los suyos a cierta distancia, mientras que en defensa los riojanos se iban ajustando ante las ausencias por lesión de Stenmalm y Garabaya. Con Miguel Sánchez, Val y Molina trataban de impedir que Sorhaindo recibiera balones en los seis metros, además Sirgurdsson no tenía un buen día, lo que animó a Kappelin con buenas intervenciones que animaban a que los franjivinos tuvieran pausa para mover de un lado a un otro hasta encontrar al mejor compañero. En este sentido, el tanto de Val, el 9-10, fue una auténtico lujo, como lo fueron casi todas las acciones que culminó Ángel Fernández.
Esperanzador empate a 13
El Barcelona insistía y parecía escaparse tras el citado empate a 10, pero los de Jota González, valiente y aguerridos, no cejaban en su empeño. Vigo y Molina apretaban el electrónico (13-13, min. 21) después de que Kappelin abortara una contra a Víctor Tomás, lo que obligaba a Xavi Pascual a pedir tiempo muerto. Adquirió, entonces, protagonismo Ariño que, desde el extremo, hizo mucho daño -7 goles-. Un parcial de 0-3 propició que el entrenador pucelano parara el crono para animara los suyos. Los catalanes habían encontrado la ventaja y la iban a conservar, e incluso a ampliar, hasta el descanso.
La exclusión de Entrerríos debía servir de impulso para los locales, pero Víctor Tomás le robó la cartera a Ángel Fernández para batir en transición a Kappelin para colocar un doloros 14-18 (minuto 26). Pese a que Malmagro marcó dos goles, Gonzalo desbarató buenas opciones de Val y de Molina, el cuadro barcelonés continuó a lo suyos: a jugar con ritmo de vértigo, explotar las alas (Ariño y Víctor Tomas) y su lanzamiento exterior (Jallouz y Lazarov) tras atraer la atención con el pivote Sorhaindo para llegar al descanso 16-20.
Para poder creer, el arranque era importante y durante el tiempo que ambos equipos estuvieron con cinco jugadores de campo el Palacio apretaba y el contragolpe de Miguel Sánchez ponía un esperanzador 19-22 (min. 34). Sin embargo, Lazarov, desde los 7 metros, de una acción muy discutida, pasivo incluido que no se llegó a señalar, mermó la moral de los franjivinos. Por si acaso, Ariño a la contra y Lazarov desde los 9 metros colocaban un 20-26 (minuto 40) que generó que Jota González pidiera tiempo muerto en aras de recuperar la motivación.
El Naturhouse lo intentaba y peleaba contra los elementos -un dueto arbitral que pitaba todo lo sancionable para los locales y poco en los visitantes- y ante un Barcelona rocoso, duro en defensa a la par que habilidoso y rápido en ataque. La diferencia se disparaba a los 10 de ventaja para los visitantes (23-33, minuto 51) después de un parcial de 0-4. Con la vista puesta en el sábado, Jota González dio descanso a Vigo y Malmagro, mientras que Garciandia y Cadarso -detalle de clase para marcar un gran gol, el 27-37- pisaban la pista.
Con Val en los vestuarios, manotazo sobre Jallouz que supuso roja, el cuadro franjivino dejó pasar el tiempo. Igual que un Barcelona que dio minutos a Dujsheabev y Aleix -jugadores del B-. Ambos conjuntos velaban armas, con intercambio de goles para concluir el duelo 28-39, para los próximos compromisos. El que interesa es el del Naturhouse, el sábado en tierras navarras frente al Anaitasuna, ya que la segunda plaza está en juego.
Naturhouse La Rioja: Kappelin (p), Pedro Rodríguez (4), Miguel Sánchez (2), Val (1), Molina (1), Vigo (3) y Ángel Fernández (5), siete inicial, Malmagro (7, 2p), Javi García (2), Cadarso (1) y Garciandia (2).
Barcelona Lassa: Gonzalo (p), Víctor Tomás (7), Entrerríos (4), Sorhaindo (3), Sigurdsson, Lazarov (5, 1p) y Jallouz (4), siete inicial, Viran Morros, Ariño (7), Syprzak (3), Noddesbo (1), Dujshebaev, Aleix (2) y Kopljar (2).
Parciales: 3-6, 8-9, 10-11, 12-13, 13-15, 16-20 (descanso); 19-22, 20-25, 22-29, 23-32, 26-35 y 28-39 (final).
Árbitros: Óscar Raluy López y Ángel Luis Sabroso Ramírez. Mostraron roja directa a Val (min. 54). Excluyeron al local Val (min. 32); y a los visitantes Entrerríos (min. 26), Syprzak (mins. 33, 46) y Noddesbo (min. 52)
Incidencias: 1.800 espectadores en el Palacio de los Deportes.