Los jueves 12 y 19 de enero, los cines Moderno proyectan las óperas Tosca e Idomeneo desde la Casa de la Ópera de Zürich y desde Theater An der Wien, en Viena, respectivamente. La cita será, ambos días, a las 19:45 horas.
Tosca, de Giacomo Puccini, es melodrama en estado puro, un festival de ricas melodías y estallidos dramáticos que sigue siendo hoy en día una de las obras más populares de este compositor. También es una auténtica “ópera de acción”, un relato negro y realista con sus dosis de tortura, traición, asesinato, sexo y suicidio. Y en la producción de la Ópera de Zurich que aquí se presenta es un apasionante y estremecedor estudio psicosexual de tres figuras entrelazadas trágica y fatalmente.
IDOMENEO
Durante sus viajes a Mannheim y París en 1777/78, Wolfgang Amadeus Mozart hizo acopio de muchas ideas que estaba deseoso de convertir en obras propias. En 1780, la corte de Múnich le encargó la composición de una gran ópera para el carnaval de 1781. Idomeneo fue un experimento dramatúrgico y musical en el que Mozart combinó formas de la ópera francesa e italiana y narró el relato fascinante del sacrificio humano con tanto drama y variedad como le fue posible, utilizando secuencias de coro y baile.
En Múnich Mozart tenía a su disposición una de las mejores orquestas de su tiempo, y por este motivo los colores instrumentales cumplen una función más importante que en sus demás óperas. Utilizando solo el sonido de la orquesta, Mozart retrata sutilmente la agitación emocional de los personajes cuando se enfrentan a la cuestión de cuánto valen sus propias vidas y cuánto valen las vidas de los demás.