La cuesta de enero el próximo mes de septiembre será más empinada para aquellos que necesiten del servicio de comedor escolar. Así lo asegura la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de La Rioja que calculan que los precios en La Rioja serán superiores al resto de comunidades autónomas“. Unos precios que dicen se han incrementado un 73% con respecto al curso anterior. ”Demasiado altos para ser asumidos sólo por las familias“, consideran.
Así, la Fapa Rioja considera que este incremento es demasiado alto para que sea asumido únicamente por las familias y cifran la subida entre “un 56,2 % (7,17 euros/día) y un 73,2 % ( 7,95 euros/día), con respecto a lo que pagaban al comienzo de este curso escolar”, incremento que alertan deberán asumir las familias mientras que en otras comunidades autónomas la situación es distinta porque los gobiernos asumirán parte o el total de ese gasto. “No será así en La Rioja”, aventuran desde FAPA Rioja, “por lo que el próximo curso los comedores escolares riojanos serán los más caros de España”.
¿Cómo está la situación en otras comunidades autónomas?
En Extremadura el 86% de las familias tiene el comedor escolar gratuito, en Cantabria y Asturias tienen un máximo de pago para las familias, 5,5 y 4,5 euros al día respectivamente, y el resto lo asumen sus gobiernos como copago. En Galicia los comedores gestionados por el Gobierno, dan el servicio al 80% de las familias gratuito o por un euro. “Estos son algunos de los datos, y muestran que los precios del servicio de comedor de La Rioja serían entre un 35,5% y un 45,8% más altos que los de la media española, incremento con el que FapaRioja no está de acuerdo y del que no ha sido conocedora hasta la publicación de la propuesta de adjudicación”.
Desde la Federación recuerdan que colaboraron con la Consejería de Educación y Empleo en la redacción del pliego de prescripciones técnicas para la nueva licitación de los comedores escolares que desarrollan cómo deberán ser las características de las comidas, los ratios de las personas monitoras o las penalizaciones a las nuevas empresas, pero en la fijación del precio del comedor porque “una vez cerrado el pliego de prescripciones técnicas, no se ha invitado a participar a FapaRioja en ninguna otra decisión entre las que está el establecimiento del precio”, cuantía que insisten es demasiado elevado para que lo puedan asumir las familias. “Muchas de ellas han ido dejando de utilizar este servicio de comedor por los problemas generados por la anterior empresa lo que ha dificultado la conciliación y quizás el alto precio del mismo provoque un nuevo abandono progresivo de este servicio”.
Desde FapaRioja recuerdan la intención de la Consejería de Educación de “estudiar la ampliación de las ayudas al comedor para el próximo curso”, pero consideran que esta medida no es suficiente porque “el encarecimiento que van a sufrir los comedores escolares va a suponer una traba de acceso de primer nivel para las familias.” Por todo ello solicitan un “apoyo más realista, en el que, más allá de su consideración como complementario por la Ley, se valore la importancia real del comedor escolar como un servicio esencial por varios motivos: desde el punto de vista económico, por constituir una verdadera política activa de empleo al permitir la conciliación de la vida familiar con la vida laboral; desde el punto de vista social, por dar cobertura nutricional a situaciones de exclusión social; y desde la perspectiva educativa y pedagógica por contribuir al logro de que alumnado refuerce vínculos sociales y adquiera hábitos de vida saludables”. Y por esto, pide un sistema de copago “en el que, al igual que sucede en otras comunidades autónomas, se establezca un precio máximo a abonar por las familias a partir del cual, sea la administración pública la que se haga cargo de la diferencia a pagar a las empresas contratistas del servicio. Y, por supuesto, sin que ello vaya en detrimento de las ayudas ya establecidas en favor de las familias con rentas más bajas”.