Las obras de la travesía de Arnedillo, que se han venido realizando el Gobierno de La Rioja a través de la consejería de Sostenibilidad, Transición Ecológica y Portavocía durante el último año, han finalizado con una inversión de más de 770.000 euros para aumentar la seguridad vial e incorporar aceras peatonales en todo el recorrido de paso de la LR 115 por el centro urbano de la localidad.
A la inversión inicial de 649.000 euros de mejoras en la travesía se ha sumado otra partida de 120.747 euros que fue necesario añadir para estabilizar los taludes anteriores al túnel y mejorar la visibilidad en la curva de entrada al pueblo.
El consejero de Sostenibilidad y Transición Ecológica y Portavocía, Álex Dorado, y el director general de Infraestructuras, Vicente Urquía, han visitado la mejora de la travesía de la carretera LR-115 en Arnedillo, junto al alcalde de la localidad, Pedro Montalvo, que ha supuesto una actuación de ingeniería importante para crear nuevos espacios peatonales en un entorno condicionado por su difícil orografía.
Dorado ha subrayado la importancia de la “apuesta del Ejecutivo de Concha Andreu por mejorar las infraestructuras que comunican nuestros municipios y, especialmente en este caso, por ganar visibilidad en la curva de entrada al centro urbano y mejorar notablemente la seguridad vial”.
Según ha señalado, “esta infraestructura aumenta las posibilidades de sacar partido al turismo sostenible, facilitando el acceso a los diferentes recursos turísticos del municipio en una localidad tan atractiva como Arnedillo, por su turismo termal y el turismo de naturaleza al encontrarse en plena Reserva de la Biosfera, al inicio de la Vía Verde del Cidacos y en un área protegida bajo el paraguas de la Red Natura 2000, con reclamos naturales como sus colonias de buitres”.
Para el alcalde, Pedro Montalvo, esta “actuación era muy demandada por el municipio y, esta segunda fase de la travesía, gracias al Gobierno de Concha Andreu, se ha podido realizar en un plazo de dos años, cuando la primera, realizada con el gobierno anterior, se demoró durante diez años.
Según el primer edil, “lo más destacado es la mejora de la seguridad vial que ofrece ahora la travesía, con sendos tramos de acera que pemiten el tránsito de los peatones en todo el tramo de paso de la carretera por el centro urbano, en un municipio turístico como el nuestro”.
La mejora de la travesía de la carretera LR-115 en Arnedillo ha supuesto la construcción de dos tramos peatonales destinados a aumentar la seguridad de los transeúntes que transitan por la zona.
El primer tramo se sitúa en la margen izquierda de la travesía, en el acceso al municipio desde Enciso, en una longitud de aproximadamente 200 metros lineales, entre los puntos kilométricos 11+890 y 12+090.
Por otro, el segundo tramo de la travesía, en la salida hacia Arnedo, ha afectado fundamentalmente la margen derecha en una longitud de 300 metros entre los puntos kilométricos 12+570 y 12+850.
El proyecto también contemplará la instalación de sistemas de contención y barandillas que separan y protegen de manera efectiva el tránsito peatonal, y la reposición del pavimento y los elementos de señalización afectados por las obras.
El Raposal
Por otra parte, las obras de acondicionamiento y renovación de la LR-585, la travesía de Arnedo a través del polígono El Raposal, están próximas a finalizar dando paso a una mejora general del tráfico en la zona y, especialmente, en la seguridad vial de peatones y ciclistas, ha destacado el Ejecutivo regional.
Se han invertido en estas obras 3,2 millones de euros, sufragadas al 50 por ciento por cada parte y cuyos trabajos está previsto que finalicen durante el mes de abril.
El consejero de Sostenibilidad, Transición Ecológica y Portavocía, Álex Dorado, y el director general de Infraestructuras, Vicente Urquía, han visitado junto al alcalde el alcalde del municipio, Javier García, los avances de estas mejoras de la carretera LR-585 que atraviesa el polígono industrial El Raposal en Arnedo.
Para Dorado, esta intervención en la travesía “es la mejor expresión del compromiso del Gobierno de Concha Andreu con el municipio y la industria de Arnedo, para impulsar el desarrollo del tejido productivo que aquí se ubica, y actualizar el tráfico y la movilidad del polígono a una realidad cada vez más comercial e integrada en la vida urbana, que debe facilitar una mayor seguridad al creciente flujo peatonal de trabajadores y visitantes del turismo de compras que atrae Arnedo e incorporar la movilidad ciclista con un nuevo carril bici”.
El consejero ha indicado “que la colaboración entre administraciones, en este caso con el municipio del Arnedo, es fundamental para mejorar sus principales infraestructuras como forma de revitalizar el tejido industrial y, por lo tanto, de crear y mantener un empleos de calidad y así avanzar en la cohesión territorial de La Rioja”.
“Esta colaboración también se ha visto reflejada en otras inversiones de la consejería, como las mejoras en el polígono industrial de Planarresano, con una inversión de una inversión de cerca de 1.200.000 euros, emprendidas en los últimos años y que dan cuenta del carácter inversor de esta Consejería, que atiende a reclamaciones pendientes desde hace años por parte de ejecutivos anteriores, como estas que visitamos en el caso de Arnedo”, ha recordado.
Por su parte, el alcalde de Arnedo ha señalado que “este era el último acceso a la ciudad que estaba por modernizar” y ha añadido que “la visita fin de obra se podrá realizar justo antes de Semana Santa, faltan aún algunos detalles, pero ya se ve cómo va a quedar”. También aclaró que, aunque la “obra está en plazo y va a buen ritmo, las complicaciones que han surgido en la sustitución de las redes de abastecimiento de agua y los saneamientos es lo que más está costando, pero era una necesidad”.
Con estos trabajos, ha afirmado Javier García, “queremos humanizar nuestro urbanismo: Arnedo ha comenzado esta legislatura una estrategia para aplicar a todas las obras un humanismo racional y sostenible en el que el peatón va a encontrar una ciudad más amable y segura con aceras más anchas, mejor iluminación y en el que vamos a incorporar el uso de la bicicleta”. Según ha asegurado, “también los vehículos van a tener una circulación más segura, porque peatones y ciclistas tienen su espacio, ya que antes no había ni aceras, ni carriles bici”.
Al construirse la variante de Arnedo (actual LR-123), lo que antes era el acceso principal de la ciudad desde el norte, la carretera LR-585 que atraviesa el polígono de El Raposal, ha adquirido un carácter fundamentalmente urbano e industrial.
En este contexto, el proyecto abarca desde la intersección de la carretera LR-123, en la denominada Glorieta del Calzado junto al polígono industrial El Campillo, y se extender hasta la Glorieta de la avenida de la Constitución, junto al polígono El Raposal, en un recorrido de 2,1 kilómetros.
Las obras en la carretera LR-585 que comenzaron en enero de 2022 y están próximas a su finalización en abril, se han desarrollado en dos zonas diferenciadas. Por un lado, el primer tramo en la zona interurbana, entre el p.k. 0+000 al 1+035, se inicia en la denominada glorieta del calzado, y termina en el comienzo del tramo urbano.
La actuación proyectada aprovecha en lo posible la carretera existente, en lo que se refiere a trazado en planta y alzado. Por otro lado, el segundo tramo, entre el punto kilométrico 1+035 y el 2+112, corresponde con la zona urbana industrial del polígono El Raposal, donde están ubicadas gran cantidad de naves industriales y comerciales a ambos lados de la carretera.
Por este motivo, era necesaria una remodelación integral con la reordenación de los espacios públicos destinados al tránsito de vehículos motorizados, ciclistas y transeúntes, con la incorporación de aceras y un carril bici. Tras la remodelación, la travesía contará con dos carriles de 3,0 metros que permiten obtener una calzada total de 6,0 metros, con arcenes de 0,40 metros a ambos lados y una acera de 1,80 metros de anchura con su correspondiente bordillo.
A su vez, el nuevo carril bici que va a promover la movilidad sostenible entre trabajadores y visitantes que frecuentan el polígono industrial tiene una anchura de 2,00 metros y discurre por la margen izquierda de la calzada.
Las obras han supuesto también la reposición de los servicios de saneamiento, abastecimiento, telefonía y telecomunicaciones, y electricidad, así como la protección de la canalización de gas en algunos puntos. Además, se ha renovado el pavimento, prolongado o renovado los elementos de drenaje, y sustituído los elementos de señalización horizontal y balizamiento.