Una de las revistas que edita la Asociación Médica Americana, 'Archivos de Dermatología', publica esta semana un análisis científico sobre los diferentes métodos para la erradicación definitiva del vello. “El vello es una preocupación frecuente entre las mujeres, y puede tener un profundo efecto psicológico en su bienestar”, indican los autores en la introducción al estudio. “La fotodepilación definitiva con láser, sobre la cual se informó por primera vez en 1996, funciona mediante la destrucción del folículo”, recuerdan.
Para estudiar estos métodos, un equipo de médicos analizó los resultados de láser de alexandrita (de 12 y 18 milímetros) como método individual; láser Nd:YAG (12 milímetros) y una combinación de ambos para reducir el crecimiento del vello de las piernas en cuatro áreas de 20 voluntarias con una edad media de 32,6 años.
Las participantes se sometieron al tratamiento en un centro privado y recibieron un total de cuatro sesiones con intervaloes de ocho semanas. La densidad media de vello se midió en cada fase para registrar su evolución y la reducción se comprobó con fotografías digitales. También se llevó la cuenta de los efectos secundarios.
A los 18 meses del tratamiento, la eficacia era del 75,9 por ciento para el láser de alexandrita; del 84,3 por ciento para el Nd:YAG y del 77,8 por ciento para la terapia combinada.
Los casos de dolor en la zona tratada fueron más severos con el primer procedimiento que con el Nd:YAG. Además, se produjeron más casos en las áreas tratadas con los dos láser. También en estas áreas se dieron más casos de hiperpigmentación (aparición de áreas oscuras en la piel). Cuatro de las participantes se quejaron de este inconveniente en todas las sesiones.
“A pesar de que otros estudios plantean que hay mayor eficacia con el láser de alexandrita, nuestros resultados muestran que no hay diferencia entre ambos métodos”, concluyen.