Galiana asegura que el Gobierno de La Rioja no puede impedir legalmente que Serunión opte al nuevo contrato de comedores
El consejero de Educación, Alberto Galiana, ha asegurado este lunes que “no está dentro de las posibilidades legales” del Gobierno riojano impedir que Serunión opte al nuevo pliego de contrato para los comedores escolares ni rescindirle el actual.
Galiana, en declaraciones a los medios de comunicación tras comparecer en el Parlamento de La Rioja, ha negado la posibilidad de impedir a Serunión volver a optar al contrato para los comedores escolares tras la última aparición de gorgojos en unas alubias que iban a ser usadas en comedores escolares. Así, ha explicado que “La ley de contratos de las administraciones públicas tiene unas garantías legales que impiden a las administraciones actuar fuera del Estado de Derecho”. Por tanto, “es una cuestión que no obedece a una decisión de la Consejería de Educación” y el Gobierno de La Rioja no puede “ir más allá” de las “penalizaciones” que ya se están poniendo. En cuanto a “quitar el contrato, tan sólo es posible cuando se producen una serie de infracciones sucesivas conforme a los pliegos que estaban ya elaborados”, ha relatado.
De este modo, el pliego de contrato elaborado por el anterior gobierno, hace más de un año, ha dicho, “limita las posibilidades de realizar cualquier tipo de medida adicional”. “Aún así, obviamente, intentaremos aplicar las sanciones necesarias, si es que lo son, en cuantos episodios se produzcan aunque esperemos que ya no se produzcan más”, ha añadido.
La empresa, ha recordado, “fue ”sancionada“ y se han ”redoblado los controles“, de modo que, fruto de esto, en el último episodio ocurrido las cocineras pudieron retirar las alubias, con gorgojos, antes de ser cocinadas y no se sirvieron, tampoco, en los centros a los que les llega la comida desde las cocinas centrales. Ha apostado por que el actual contrato tenga ”la menor duración posible“ y ha adelantado que el pliego del nuevo contrato que lo sustituirá ”está muy avanzado, a falta de ser analizado jurídicamente“”.
La “voluntad” del Gobierno riojano “es que se produzca a la mayor brevedad posible” pero, mientras tanto, ha constatado, no se puede dejar de ofrecer el servicio. El nuevo pliego llevará “un incremento de la apuesta por la calidad, que, obviamente”, ha añadido, “se traducirá, necesariamente, en un incremento de precios finales”. “Precisamente, en atención a ese incremento previsto de precios finales, es por lo que se ha incrementado la dotación en las becas de comedor escolar hasta los 2,5 millones y medio de euros”, ha señalado.
El consejero ha querido “agradecer públicamente a la Federación de Asociaciones de Padres y Madres el esfuerzo que está haciendo para colaborar en la realización de un nuevo pliego”. En cuanto a cambiar el catering por cocinas propias, ha dicho que “es una cuestión que requiere de un análisis profundo, sosegado y lento” y, ahora, no hay “tiempo” para eso porque lo urgente es “cambiar el contrato actual”. Así, ha visto, “hay que priorizar cambiar el sistema actual” y “luego” se “valorará con mayor profundidad” esa posibilidad junto con la FAPA“.
Mientras tato, desde la Federación de Asociaciones de Padres y Madres (FAPA) se ha propuesto a las distintas AMPAS volver a concentrarse este miércoles, 15 de noviembre, para reivindicar el derecho a una alimentación adecuada para los escolares. Las reclamaciones son un comedor escolar en el que exista una seguridad alimentaria con unos productos y elaboraciones de calidad; y que se pueda cocinar en cada escuela dado que, para FAPA, es el mejor sistema para mejorar la seguridad y la calidad de la alimentación. FAPA también cree que “no es justo” que Serunión “ni ahora, ni en el nuevo pliego, después de los dos últimos años con problemas, pueda estar en los comedores”.
UGT pide al Gobierno de La Rioja siga el ejemplo del País Vasco
Por su parte, UGT Servicios Públicos ha exigido la “inmediata” rescisión del contrato de la empresa 'Serunion', tras el aluvión de incidencias advertidas desde los colegios riojanos por “las insalubres condiciones de los menús escolares elaborados por esta empresa”. Desde UGT “creemos que la empresa está poniendo en peligro de forma reiterada la salud de los alumnos”. Desde el mes de septiembre, se han multiplicado las quejas de las organizaciones sindicales, asociaciones de madres y padres y responsables de cocina, alertando de “la nula calidad de los productos y del riesgo alimentario para los alumnos”.
El pasado mes de septiembre, los responsables de cocina de los colegios riojanos registraron gusanos en platos de pasta de hasta 14 colegios, mientras que, este mes, las asociaciones de madres y padres han reclamado la mejora del servicio tras aparecer trozos de plástico en diferentes menús y comida “insípida y cruda”.
Por esta razón piden al Gobierno de La Rioja “que siga la senda del Departamento de Educación del País Vasco de estudiar opciones jurídicas para rescindir el contrato con ”Serunion“. UGT Servicios Públicos La Rioja considera que la solución no pasa por imponer multas y más supervisión a los menús escolares, sino ”con contar con cocineras y cocineros públicos en los colegios“.
Asimismo, han reclamado a la Consejería de Educación que tenga en cuenta que los incumplimientos de 'Serunion' son “muy graves”, y que la externalización de los menús escolares no funciona, por lo que exigimos que los alumnos puedan comer con productos de calidad en una etapa de vida de crecimiento y desarrollo físico. Una vez más, se ha demostrado que los colegios que cuentan con cocineras y cocineros que elaboran los menús para los alumnos prestan un mejor servicio. De hecho, han sido ellas y ellos quienes, de nuevo, han detectado los gorgojos.
Para UGT estos incidentes “son inadmisibles y un insulto grave a los usuarios de estos comedores escolares y sus familias”. La contratación de este servicio a la empresa 'Serunion SAU' “obedece únicamente a criterios económicos, y creemos que allí donde hay cocineras y cocineros de la Comunidad Autónoma se come mejor y con más seguridad”.
El sindicato apuesta por un modelo de cocina en el que, con personal propio suficiente, se apueste por la calidad del servicio, tanto en su elaboración como en la adquisición de alimentos de nivel aceptable y su mantenimiento o conversación con garantías de calidad, algo que ya ocurre en algunos colegios en La Rioja y “que queremos extender a toda la región”.
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