El juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón ha presentado este sábado un recurso de apelación ante la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo en el que alega que han sido “motivaciones ideológicas” las que han motivado a “grupúsculos y organizaciones marginales” a ejercer una acción contra él.
En su recurso, al que tuvo acceso Europa Press, presentado por el abogado de Garzón, Gonzalo Martínez-Fresneda, indica que la doctrina expuesta en el auto del magistrado del Alto Tribunal Luciano Varela, que anticipa que le abrirá juicio oral por declararse competente para investigar las desapariciones durante la Guerra Civil y el franquismo, es “contraria a Derecho e impone un serio riesgo para la independencia judicial, garantizada en el artículo 117 de la Constitución Española”.
Asimismo, Garzón lamenta que el auto del Supremo tome partido por su suspensión cautelar, “adelantando así lo que sería la pena prevista para el delito de prevaricación”.
En relación con el derecho de las víctimas de la Dictadura franquista, el juez critica que el auto del Alto Tribunal “vuelve a insinuar” que su comportamiento es “bienintencionado”, pero que ello no le exculparía del delito.
Sobre esto, alega que el fundamento último de toda la actuación jurisdiccional es garantizar que toda persona tenga asegurada su tutela judicial efectiva de jueces y magistrados en el ejercicio de sus derechos e intereses y que, por tanto, ejercer esta tutela “no es algo 'bienintencionado' o 'encomiable', sino obligado dentro del funcionamiento de los tribunales”.
“Proteger y dar respuesta a las víctimas se sitúa en el núcleo del derecho fundamental a la tutela judicial efectiva, antes que en el de las obras humanitarias”, apostilla.
NADA IMPIDE INVESTIGAR
Por otra parte, afirma que “no hay ningún precepto en la Ley de Amnistía que impida investigar ningún hecho delictivo”, y considera que “la experiencia de nuestro tribunales es que deben investigarse y llevarse a juicio hechos supuestamente constitutivos de delito por más que se pueda presumir que estarían comprendidos en la Ley de Amnistía”.
El abogado de Garzón asegura en su escrito que el proceso penal incoado por el juez de la Audiencia Nacional “no perjudicó a nadie”. “Se nos escapa la potencia o relevancia del bien jurídico lesionado, en una matizada compensación de intereses, que obliga a apartar de las funciones jurisdiccionales y sentar en el banquillo a mi representado y a desproteger al mismo tiempo a las víctimas de los crímenes franquistas, condenándolos a no saber nunca qué pasó de sus padres y hermanos”, subraya.
Justifica también que ha tenido que presentar las alegaciones este sábado porque “sorprendentemente” le han concedido tres días 'naturales' y no 'hábiles' para su formulación. “Ignoramos a qué se debe este insólito e injustificado cambio de criterio respecto al mantenido hasta el momento”, señala.