Una investigación conjunta entre la Policía de España y Francia ha conducido a la intervención de 92 kilos de heroína en ambos países, lo que supone la mayor aprehensión de esta droga en lo que va de año en nuestro país.
La operación, en la que participaron 40 agentes y que se extendió durante ocho meses, ha culminado con la detención de cuatro personas, entre las que figura el cabecilla del grupo que además regentaba dos restaurantes en Barcelona.
La droga, procedente de Turquía, ha sido localizada en Madrid y en la localidad de Argeles-Sur-Mer, al sur francés, y los cuatro miembros de la organización han sido acusados de un delito contra la salud pública dentro del operativo bautizado con el nombre de 'Galgo', según informó la Policía.
Las investigaciones se iniciaron en enero al detectar un grupo organizado que podrían dedicarse a la introducción y posterior distribución en España de importantes cantidades de heroína procedente de Turquía. El grupo investigado estaba dirigido por un ciudadano con pasaporte sueco, de origen curdo-iraní y afincado en la provincia de Barcelona donde regentaba dos establecimientos de hostelería.
Las pesquisas revelaron que el sospechoso contaba con proveedores de la droga en Turquía y con colaboradores franceses, residentes en zonas próximas a la frontera española de La Junquera (Gerona), encargados de realizar labores de recepción, transporte y entrega de las partidas de heroína a los distribuidores que operaban en escalones inferiores.
Dos subordinados, de nacionalidad francesa, estaban a las órdenes del cabecilla de la banda y dedicaban a recoger, transportar el dinero y almacenar la droga en 'caletas' --viviendas o locales habilitados para ocultar el estupefaciente-- situadas en territorio francés.
DESDE EL SUR DE FRANCIA A MADRID
A mediados de junio, los agentes españoles detectaron una inminente importación de droga desde Turquía. Siguiendo instrucciones del proveedor instalado en Turquía, el jefe del grupo había establecido contacto con un individuo marroquí, residente en Málaga, que actuaba como intermediario con distribuidores españoles a pequeña escala y que sería el destinatario de parte de la droga.
En ese momento, agentes de la UDYCO Central de la Comisaría General de Policía Judicial se pusieron en contacto con la OCRTIS francesa, incrementaron la coordinación e intercambio de información frente al envío de la heroína.
Cerrados los detalles de la entrega, el máximo responsable de la organización transmitió a sus dos colaboradores directos las instrucciones para trasladar la droga desde el sur de Francia hasta Madrid. El día acordado para el transporte, recogieron el estupefaciente a primera hora de la mañana y lo desplazaron en un vehículo todo terreno con dirección a Madrid. Ese día, el responsable viajó en tren hasta la capital española para supervisar que la droga se entregaba oportunamente.
A medio día, a la altura del peaje instalado en el kilómetro 18 de la Radial 2, los agentes interceptaron el vehículo que trasportaba la droga. En el interior de una maleta, se hallaron 30 paquetes que contenían 15,6 kilogramos de heroína y los agentes procedieron a la detención del conductor del turismo.
Asimismo, fueron detenidos en Madrid el máximo responsable de la organización y su contacto en el momento en que ambos se reunieron tras la llegada del primero a la capital.
Los policías agentes localizaron en el vehículo una factura de alquiler de un hangar ubicado en la localidad francesa de Argeles-Sur-Mer. Acto seguido, comunicaron a la Policía Judicial de Perpignan la ubicación del almacén, que registró el local y halló 76,5 kilogramos de heroína repartidos en paquetes de medio kilo. Los agentes galos detuvieron también a otro miembro de la organización.
La operación ha sido desarrollada por agentes de la Sección II de la Brigada Central de Estupefacientes de la UDYCO Central, el Grupo XIV de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Madrid, la OCRTIS de la Dirección Central de la Policía Judicial francesa y la Policía Judicial de Perpignan.