El próximo lunes 22 de febrero la Comisión Interministerial que se encarga de elegir la localización de los futuros Almacenes Temporales Centralizados (ATC) de residuos nucleares dará a conocer los posibles candidatos a albergar la instalación.
Miguel Sebastián, Ministro de Industria ha afirmado en el Senado que escuchará a las Comunidades Autónomas a la hora de ubicar el almacén. El ministro añadió que el gobierno tiene una lista “definitiva” de ocho candidatas a acoger el ATC.
Una vez publicada la lista definitiva, que se hará pública el próximo lunes 22 de febrero, la Comisión Interministerial se encargará de analizar la candidatura de cada municipio, de forma que se puedan determinar las zonas no aptas para albergar el ATC. Por último la Comisión procederá a estudiar los terrenos propuestos y publicará un informe con las ventajas de los mismos. A través de este último documento, será el propio gobierno quien decida el emplazamiento definitivo del almacén de residuos.
El Ministro de Industria afirma que el proceso de selección que llevará a cabo el Ejecutivo se regirá por los principios de “transparencia, equidad y voluntariedad”. Apuntó también que se escuchará a las Comunidades Autónomas, y que se buscará principalmente el consenso de todas las partes.
Para Sebastián, la creación de un ATC no es una decisión “ni de derechas ni de izquierdas, ni pro-nuclear ni antinuclear”. “Es, simplemente, una decisión coherente y responsable”, explica el Ministro, que asegura que “el ATC no crea un problema, si no que resuelve la cuestión de los residuos”.
Por el momento, los municipios admitidos para albergar el futuro ATC son Albalá (Cáceres), Ascó (Tarragona), Melgar de Arriba (Valladolid), Santervás de Campos (Valladolid), Torrubia de Soria (Soria), Yebra (Guadalajara), Villar de Cañas (Cuenca) y Zarra (Valencia).
Los defensores del Almacén Temporal Centralizado aseguran que su construcción supondría diversos beneficios para el municipio que lo aloje, tanto en el aspecto económico (inversión en construcción, traslado de nuevas empresas a la zona) como en el aumento de la población. Por otra parte, los detractores de las ATC afirman que no solucionará el problema de las centrales nucleares, y que podría conllevar diversos riesgos para la población cercana a la instalación, como mayor porcentaje de enfermedades cancerígenas o la posibilidad de accidentes nucleares a la hora de trasladar los residuos.