La selección italiana femenina se proclamó campeona en el Europeo disputado en Polonia tras vencer a Holanda en tres sets (25-16, 25-19, 25-20), mientras que la anfitriona Polonia consiguió la medalla de bronce.
Las italianas consiguen su segundo Europeo consecutivo, cediendo sólo dos sets en todo el torneo. El encuentro, disputado en Lodz, es el octavo consecutivo que consiguen las vencedoras, demostrando el gran nivel del voleibol femenino en Italia.
Por otra parte, Polonia se adjudicó la medalla de bronce frente a Alemania en el Atlas Arena, en el que trece mil personas llevaron en volandas a su selección. Las polacas, campeonas en 2003 y 2005, no han conseguido esta vez el oro, pero logran el tercer puesto en un encuentro en el que vencieron en tres sets(25-16, 25-19 y 25-23).