La sentada de los jugadores del Logroñés en el primer minuto de partido acabó siendo una de las imagenes del derbi. ¿Por qué? Todo el mundo miraba, sin encontrar, al destinatario de la afrenta. Juan Hortelano, propietario y presunto pagador de la plantilla no ha cumplido con los jugadores y ellos quisieron hacerse oir de la manera más eficaz.
Jaume, capitán blanquirrojo, reconció en rueda de prensa que “el club no pasa por su mejor momento en lo económico, pero siguen sin cumplir con sus promesas. Todo sigue igual y los jugadores seguimos sin cobrar lo que nos corresponde”, señalaba el catalán.
La medida de protesta que, en principio, no volverá a repetirse, es para “que la gente lo sepa”, señalaba Jaume. “Es cierto que el presidente dice que está al día en los pagos, pero sabe que no es así, que hay porcentajes de fichas muy altos, de un 50 o un 60 por ciento, que están sin abonar”.