“Ha sido una experiencia gratificante pero muy dura. Me he tenido que salir de muchas de las casas que hemos visitado después de presenciar algunas situaciones entre padres e hijos”, ha dicho el ex waterpolista Pedro García Aguado, el 'Hermano Mayor' de Cuatro, que desde el viernes 24 de abril conducirá el nuevo coach de la cadena.
El deportista será el encargado de tratar con adolescentes rebeldes y con problemas de adaptación, así como de mediar con sus padres en este formato, adaptación del francés “Le Grand Frère”, que sustituirá desde la próxima semana a “Supernanny”, que este viernes cierra su cuarta temporada.
ADOLESCANTES TIRANOS
“En ‘Hermano Mayor’ trataremos con adolescentes que rondan la mayoría de edad y que han creado un conflicto familiar. Chavales que han impuesto su tiranía y su ley en sus casas”, ha relatado el director de Programas de Cuatro, Mariano Blanco.
Producido por Plural (“Cuarto milenio”, “Tal Cual”, “Hay alguien ahí”, etc.), el programa tratará de ayudar a jóvenes de entre 17 y 19 años, algunos de los cuales han cometido delitos de hurto, “aunque nunca hablamos de marginalidad, porque son casos que se producen en casas y barrios normales. Problemas entre padres e hijos existen en toda la sociedad”, ha apuntado Blanco.
Para lograr un cambio de actitud en los jóvenes, el programa ha elegido al ex waterpolista Pedro García Aguado, que se ha servido de su experiencia personal para ayudar a los adolescentes que protagonizarán las seis entregas del programa. “Me he sentido bastante reflejado en los chicos y en las casas a las que hemos acudido”, ha confesado Aguado, que tras una vida deportiva de éxitos cayó en el mundo de las drogas.
“Triunfé en el Waterpolo, pero no en la vida personal. Cuando me ponía el gorro y el bañador era Superman, pero cuando me lo quitaba, era una persona muy diferente”, ha relatado el “Hermano Mayor” de Cuatro, quien asegura que se enfrentará a los jóvenes “con autoridad pero nunca con violencia”.
Antes de actuar, el programa da a conocer cuáles son los conflictos o problemas más relevantes entre el joven y sus padres. El espectador se ‘colará’ en la vida de la familia. Es el momento del “Hermano Mayor”.
Tendrá entonces el primer contacto con el joven, pero también con cada uno de los miembros de la familia. “Hermano Mayor” tratará casos como el de jóvenes especialmente agresivos con sus padres, que hurtan en tiendas con total cotidianidad, con problemas de autoestima, con actitudes pasotas, caprichosas... casos que parecen de difícil solución.
RESTAURAR LA AUTORIDAD
Será la primera misión. Deberá dejar clara cuál es su posición durante la terapia y restablecer el respetocon los adultos de la casa y con el adolescente.
En esta etapa, el “Hermano mayor” enseñará al joven a desprenderse de toda su rabia a través del ejercicio físico y del deporte: natación, boxeo, baloncesto, etc. Cualquier disciplina deportiva es buena para sacar fuera toda su furia.En esta parte del programa, Pedro García hace ver a los padres la importancia de recuperar su rol de padres y de que se restablezca una comunicación basada en el respeto.
Un grupo de profesionales ofrecen apoyo adicional a la familia para superar el problema: psicólogos, expertos en inserción laboral, jóvenes problemáticos y reinsertados... Todos ellos establecen sesiones de trabajo con los padres y los jóvenes para complementar la labor del Hermano.
GARCÍA AGUADO, UNA VIDA MARCADA POR EL WATERPOLO Y LAS ADICCIONES
Siendo adolescente sus padres se separan y rellena sus carencias afectivas con el alcohol: “Empecé a beber a los 15 años. Era tan bruto que para tener el valor de hablar con una chica, tenía que beber.” Desde entonces, el deporte se convierte en el centro de su vida: “Vivíamos bien: jugábamos, nos entrenábamos, descansábamos y salíamos. Ganábamos dinero como seleccionados y nos comíamos el mundo... Y algunos nos lo bebíamos.”
“En 1990, después de los JJ.OO. de Seúl, donde habíamos quedado sextos, empecé a esnifar cocaína. A partir de 1998 estaba tan enganchado que consumía jueves y viernes por la noche; el sábado daba una excusa para no entrenarme y el domingo iba al partido. Pensaba: ”Soy campeón del mundo... ¡Medalla de oro! ¡Cómo voy a ser un adicto! Adictos son esos vagabundos que duermen sobre cartones en un portal; yo soy un triunfador.“
Tras catorce años consumiendo ingresé en el centro Mare Nostrum con mi mejor amigo, el también campeón de waterpolo Jesús Rollán, que acabó suicidándose. Me dijeron: “¿Quién eres?”. “Yo soy Pedro García, el campeón olímpico”. “No, Pedro tú eres un adicto, un alcohólico y un cocainómano”.“Y tú, un hijo de puta”, contesté llorando. Pero sabía que tenían razón“.
De esto hace ya cinco años. Cuando Pedro García Aguado acabó su tratamiento empezó a ayudar a personas con su mismo problema: “Poco a poco, traté de volver a ser útil. Estudié, descubrí que podía ayudar a otros adictos. Ha trabajado como terapeuta del Centro Mare Nostrum de Barcelona donde trata todo tipo de adicciones y problemas de conducta. También colabora con otros centros donde se encarga de ayudar a adolescentes.
PSICÓLOGOS EN LA TELE
Pedro García Aguado tiene la experiencia suficiente para ayudar mucho en los casos a los que se enfrenta. Además, está asesorado por un grupo de psicólogos encabezado por Esther Legorgeu, psicóloga clínica especializada en adultos y adolescentes. Desde hace cinco años dirige el departamento de psicología clínica del Instituto de Orientación Psicológica EOS, centro de referencia en psicología a nivel nacional.
Esther Legorgeu compagina el tratamiento de sus pacientes y la dirección departamental con la impartición de cursos de prevención e intervención para adolescentes (acoso escolar, trastornos de la alimentación, estrategias de estudio, ansiedad ante los exámenes, conductas adictivas, ocio inteligente, autoestima, fobia social…). A lo largo de su carrera profesional ha participado en diferentes publicaciones escritas, radiofónicas y televisivas.