Julen Lopetegui ha sido nombrado nuevo entrenador del Real Madrid Castilla para las dos próximas temporadas. Hasta ahora ocupaba un cargo de peso en la entidad blanca, como es el de Director del Departamento Internacional de Ojeadores. El Club ha decidido apostar por un hombre de la casa, que ya tuvo experiencia en los banquillos dirigiendo al Rayo Vallecano. El vasco es uno de los mejores conocedores del mercado internacional de este país. Un hombre de fútbol, dedicado, apasionado y trabajador que aportará todas esas cualidades entrenando al filial.
Portero del Castilla en los años 80
Curioso es que, el que ahora será su equipo como entrenador, lo fue como jugador a finales de los años 80. Criado en las categorías inferiores de la Real Sociedad, prolífica cantera de porteros. Su enorme proyección y una serie de grandes partidos le valieron para que el Real Madrid pusiera sus ojos en él. Lopetegui ingresa en el club en 1985 para defender la portería del Castilla. En el primer filial del Real Madrid permanece tres temporadas, hasta que es cedido a Las Palmas, donde estuvo un año.
Esta cesión le consolidó como un portero de primer nivel. El año siguiente vuelve al Real Madrid. Debuta en Primera División con la camiseta blanca en 1990 en el Vicente Calderón en un empate a tres goles. Pero la titularidad se antojaba difícil en el Santiago Bernabéu ya que el ‘uno’ pertenecía a uno de los mejores guardametas de la historia del Real Madrid, Francisco Buyo. El donostiarra decide hacer las maletas y viajar a La Rioja, para enrolarse en las filas del Logroñés.
Consolidación en Primera División e internacionalidad
En el Logroñés juega sus mejores partidos en Primera División. En 108 encuentros se consolida como uno de los mejores del país, lo que le vale para que en 1994 Javier Clemente contara con él, junto con Andoni Zubizarreta y Santiago Cañizares, para la selección nacional. Debutó con la roja en un amistoso contra Croacia previo al Mundial de Estados Unidos de 1994, en el que también estuvo convocado.
Esas tres temporadas de éxito en Logroño le sirven para fichar por el FC Barcelona. En la capital catalana permanece dos temporadas en las que no tuvo demasiada suerte. Su siguiente destino fue el Rayo Vallecano, en Segunda División. Con los flanjirrojos asciende a Primera y disfruta de tres temporadas más, hasta su retirada en 2002. Tras su retirada, ha seguido vinculado al mundo del fútbol. Tanto como entrenador -dirigió al Rayo Vallecano y fue entrenador de porteros de la selección española- como comentarista de televisión en diferentes canales. La pasada temporada, el donostiarra fue el jefe de los ojeadores del Real Madrid.