La Marcha Hoyos de Iregua, prueba organizada por Fundación Caja Rioja que cuenta con el apoyo técnico de la Sociedad de Montaña Sherpa, con la colaboración de Bankia, el Parque Natural Sierra de Cebollera y los Ayuntamientos de Villoslada y Brieva, y el patrocinio de Radio Rioja Cadena SER, Repro Centro Digital, Peñaclara, Caramelos El Avión, Coca-Cola, Mudanzas Mayoral, Domingo García Espacios Efímeros, Paté Camerano, Café Baqué y Suzuki ultima su preparación y finaliza el plazo para beneficiarse de su precio más reducido, 15 euros, el próximo día 2 de octubre.
Asimismo, si se quiere contar con la posibilidad de acudir a la cita en servicio de autobús que fleta la organización debe realizarse su reserva en la sede de la Fundación Caja Rioja (Calle La Merced, 6 de Logroño) también en esa fecha presencialmente en horario de mañana.
La inscripción el mismo día de la prueba se realizará de 7:00 a 7:45 horas con un precio de 18 euros y sujeto a las plazas que restan al estar limitada la participación.
Esta edición transita por los lugares más emblemáticos del Parque Natural de Sierra de Cebollera, su cordal alto desde el Alto del Castillo hasta Santosonario (2040 m) ofreciendo toda la singularidad natural del parque y las mejores panorámicas. Además de la asistencia y avituallamientos habituales, los inscritos contarán con su identificación con diferentes recuerdos conmemorativos y una degustación final de Paté Camerano
Información e inscripciones
Las inscripciones pueden realizarse on line a través de la página web de la Fundación Caja Rioja (www.fundacion-cajarioja.es) y en la sede de la Fundación hasta el 2 de octubre con un precio de 15 euros. Asimismo, se realizarán el mismo día de la prueba en el frontón de Villoslada de Cameros, entre las 7:00 y las 7:45 horas, con un importe de 18 euros. La organización dispone de un servicio de autobús desde Logroño hasta Villoslada que tiene un precio de 5 euros; el billete de autobús tiene que retirarse en la sede de la Fundación Caja Rioja y las plazas son limitadas.
Más información: www.fundacion-cajarioja.es
Recorrido
Villoslada de Cameros (km 28,5 / 1.050 m)
La Marcha sale de Villoslada y toma la falda del monte entre la carretera de Montenegro y la de Lomos de Orio, siguiendo lo que fue un día una de las vías de trashumancia: la Cañada Real Galiana. La subida es empinada hasta alcanzar el abrevadero de la Holleja.
Abrevadero de la Holleja (km. 2,8 / 1.430 m.)
Algo más arriba, evitamos las peñas que coronan la Holleja saliendo por la izquierda de la mano de una sendereja que, tras un faldeo, termina sacándonos a la línea del monte. Un cortafuegos sin desnivel nos lleva hasta la base de la siguiente cota.
Antecima del Alto del Castillo (Km. 5,5 / 1.670 m.)
Llegamos al primer avituallamiento y control de paso a partir del cual evitaremos el roquedo que conforma esta cima ladeando por la izquierda para retornar de nuevo al cumbrero y proseguir hacia la siguiente cumbre.
Alto de San Vicente (km. 8,0 / 1.880 m.)
Llegamos a la cumbre del alto de San Vicente y, manteniendo la dominante suroeste que nos ha traído desde Villoslada, seguimos durante un buen trecho por un camino incierto que atraviesa un inacabable pinar. La referencia continua es la alambrada jurisdiccional entre Villoslada y Montenegro, que nos acompaña más o menos próxima por la derecha. Al fin, una vieja trocha viene a nuestro encuentro y ya, sin otro inconveniente, terminamos por alcanzar el cordal principal de la sierra.
Laguna de Buey (km. 12,5 / 1.980 m.)
Aquí, doblamos a la izquierda, tomando un sentido sur-sureste, por terreno abierto, con amplios paisajes hacia las dos vertientes de la sierra, y siguiendo un sendero que busca el Castillo de Vinuesa. Al llegar a su cumbre, la evitamos con un faldeo por su izquierda. Sin grandes desniveles, salvamos este impresionante roquedo hasta salir a un pequeño rellano, en el extremo opuesto.
Antecima Castillo de Vinuesa (km. 15,5 / 2.040 m.)
Hacia el este, la panorámica de la Sierra Cebollera es absolutamente admirable, apreciándose sin trabas sus cumbres más significativas: Santosonario, Telégrafo, Pico Cebollera y Mesa de Cebollera. Perdiendo altura, salimos a una zona muy tendida que nos va llevando a la siguiente cota.
Antecima Santosonario (km. 19 / 2.000 m.)
Un hermoso roquedo de conglomerados grises conforma la cima de esta cumbre. Para cambiar la inercia, esta vez evitamos la peña con un faldeo por su derecha. Un leve camino en descenso nos permite alcanzar, un buen trecho después, un paso en el cordal de cumbre para entrar en uno de los Hoyos de Iregua.
Entrada Hoyo Mayor (km. 21 / 1.950 m.)
La senda se precipita hacia el fondo de la cubeta glaciar, trazando sucesivos zig zags para salvar la acusada pendiente. En algunos tramos, el suelo se halla bastante descompuesto y exige atención. Al fin, salimos a las zonas verdes por donde fluyen las prime-ras aguas de uno de los arroyos que más abajo forman el río Ra.
A partir de aquí, el camino se vuelve fácil. Llegamos a una pista.
Pista de Hoyos (km. 22,5 / 1.680 m.)
El avituallamiento y control de paso 2 se sitúan en la pista que enlaza el acceso a Hoyos y la Ermita de Lomos de Orio a partir del cual seguimos ladera abajo, buscando la compañía del río Ra, hasta que lo alcanzamos. Y ya de su mano, llegamos a un vado de troncos que nos permite salvar sus aguas y llegar, al poco, a otro de los rincones más emblemáticos de Cebollera: las cascadas de Puente Ra.
Seguimos pista abajo, para llegar a un puente.
Puente Ra (km. 26 / 1.275 m.)
Aquí, cambiamos de nuevo de margen del río. Y por pista, con mejor piso que hasta ahora, alcanzamos una hermosa zona abierta de esparcimiento: La Blanca.
La Blanca (km. 27,5 / 1.200 m.)
En este lugar, las aguas de los ríos Ra y del Iregua unen sus fuerzas en busca del Ebro.
Por un rústico puente de madera, cambiamos por última vez de lado del río. Por su margen derecha avanzamos, entre zonas de pasto, arboledas y merenderos, hasta el Achichuelo.
Achichuelo (km. 29 / 1.165 m.)
En el Achichuelo, otro de los enclaves naturales que es imagen de marca del patrimonio natural de La Rioja, se sitúa el tercer control de paso y avituallamiento. Sin cambiar de margen, seguimos en compañía del Iregua, entre hayas, desecadas, prados y una variada vegetación de ribera. Llegamos, un trecho después, a un barranco lateral por el que baja un afluente del Iregua.
Puente Rameras (km. 30,5 / 1.125 m.)
Solo queda un último esfuerzo para alcanzar la meta. El camino sube y baja con leves desniveles, se acerca o se aleja un tanto del río, que se acompaña a veces de prados y siempre de una profusa vegetación de ribera.
Y al fin llegamos a destino, principio y fin de esta Marcha: Villoslada de Cameros.