La crisis duplica las demandas de empleo en Cruz Roja

El número de personas inscritas en el programa de empleo de Cruz Roja se ha duplicado en los últimos dos años a causa de la crisis y han pasado de un promedio de 400 peticiones de trabajo anuales a cerca del millar en 2010 y las 500 en lo que va de año.

Según ha informado a EFE el responsable del Área de Empleo de Cruz Roja en La Rioja, Diego Alonso, de los 935 personas que participaron en proyectos integrales de empleo en 2010, 152 consiguieron un trabajo después de seguir un itinerario integral personalizado y 320 siguieron cursos de formación se formó a 320.

La mayor parte del empleo que Cruz Roja ha facilitado está relacionado con los servicios relacionados con la Ley de Dependencia, además de trabajos en empresas y trabajo doméstico.

El perfil de los demandantes ha cambiado con la crisis y si hace unos años eran fundamentalmente inmigrantes los que se acercaban a las oficinas de Cruz Roja para solicitar ayuda, explica Alonso, ahora son mayores de 45 años, “muchas de ellas” de nacionalidad española y residentes en Logroño, que han quedado sin trabajo.

También es cada vez mayor el número de personas que se quedan sin hogar porque su entidad de ahorros o banco les ha embargado la vivienda por impago de la hipoteca.

La crisis económica “ha azotado fuerte” a esta Comunidad, sostiene Alonso, quien asegura que cada vez es mayor el número de personas que acuden a la entidad a solicitar ayuda.

Recalca que Cruz Roja no es una agencia de colocación ni una empresa de trabajo temporal, sino una entidad que mantiene convenios con instituciones y empresas para completar su plan de formación, que, fundamentalmente, se inspira en conseguir un itinerario para la persona con dificultades.

Así, este plan de empleo para la inserción sociolaboral, que inició Cruz Roja en 2001, se compone de una fase de orientación, otra de formación mediante cursos y una tercera de intermediación laboral con entidades y empresas que tienen suscritos acuerdos con esta ONG o, incluso, a través de la demanda de particulares, generalmente, servicio a domicilio.

Está cofinanciado por el Fondo Social Europeo, el Ayuntamiento de Logroño y Caja Navarra, entre otras entidades.

Isabel Manzanos, responsable del departamento de Extranjería de Cruz Roja, conviene con Diego Alonso en la “dureza” con que la crisis económica ha calado en La Rioja.

Dentro del servicio de atención al inmigrante, la crisis ha provocado un cambio de tendencia en el servicio que presta Cruz Roja, explica Manzanos, quien subraya que se ha pasado de una situación de apoyo a la reagrupación familiar, antes de la crisis, a la ayuda al retorno del padre o la madre con los hijos a su país de origen.

En este último caso, es la madre o el padre el que tiene un trabajo y envía el dinero a la familia.

Según los datos de la Memoria de Cruz Roja de 2010, de las 7.903 personas atendidas el pasado año, 1.646 fueron inmigrantes a los que se prestó acogida integrar, 72 refugiados, 40 fueron atendidos en el Centro de Acogida a Refugiados, dos solicitaron la reagrupación familiar y 133 el retorno a su país.

El presidente de la Asamblea Autonómica de Cruz Roja, Fernando Reinares, en una entrevista con EFE tras ser reelegido en el cargo para los próximos cuatro años, conviene con los responsables de los citados programas en la crítica situación económica de muchas personas y familias que se han quedado sin empleo.

Ante esta situación, Cruz Roja afronta los próximos cuatro años con el reto de llegar a más personas, “cada día más necesitadas” de ayuda, y con menos recursos de las administraciones.

A este respecto, ha destacado la solidaridad de los socios, voluntarios y entidades que mantienen convenios con Cruz Roja para afrontar esta situación.