La economía española creció un 0,9% en 2008, tres décimas menos que el porcentaje hasta ahora oficial, del 1,2%, según los datos de Contabilidad Nacional revisados por el INE, que reflejan un deterioro aún mayor de la demanda nacional.
Concretamente, la revisión de las cifras indica que el consumo interno redujo su contribución al crecimiento del PIB, pasando de sumar 0,15 puntos porcentuales, según el dato de febrero, a detraer 0,55 puntos. En paralelo, la demanda externa ha incrementado su aportación desde los 1,01 puntos a los 1,40 puntos.
En cuanto a los incrementos del PIB de los años 2006 y 2007, estos se revisaron en una décima, al alza en el caso de 2006, hasta el 4%, y a la baja, en 2007, con un crecimiento del 3,6%.