Las rachas están para romperlas y los números... invitan al optimismo, pero sólo eso porque “a un partido te puede ganar cualquiera” y si se echa un vistazo a lo ocurrido hace unos días se comprueba que el colista, por aquel entonces el Astorga, fue capaz de ganar en casa del líder Racing de Ferrol. Por eso la visita a San Lázaro (domingo, 16.30) ofrece más atractivos de los esperados. Cierto que la marcha de esta Unión Deportiva Logroñés a domicilio es brillante (encadena 4 victorias 1 un empate), que la racha de 7 jornadas invicto da confianza, que el haber encajado 10 goles en 19 partidos en un aval de la solidez del bloque, pero esto es fútbol.
El Compostela destituyó a Iñaki Alonso cuando el cuadro santiagués comprobó que el objetivo de pelear por la fase de ascenso era misión imposible. Ahora el reto que tiene Alberto Mariano pasa por aguantar en la categoría. Sin embargo, desde su llegada el equipo no acaba de arrancar. Con un punto de los últimos 15 posibles y con un bagaje ofensivo pobre, 10 goles, a los gallegos les da igual quién es su oponente, su meta pasa por pelear todos los domingos por los 3 puntos. Está obligado a salir a muerte en cada duelo.
Y la UDL, pues algo parecido. ¿Por qué? Porque estar arriba exige ganar una semana, la siguiente, la que viene y la posterior y así sucesivamente. No existe otro camino para dar el salto de categoría. Además, este tipo de enfrentamientos ante el farolillo rojo casi siempre son trampas. Por un lado, si no ganas parece que has hecho el ridículo porque todo el mundo gana y si te llevas los 3 puntos es que es lo que había que hacer. Es decir, que el conjunto riojano tiene mucho que perder y nada que ganar en San Lázaro. Así de desagradecido es este deporte.
“Centrado en lo nuestro”
Carlos Pouso avisa de que “somos conscientes de que tenemos un enemigo serio en contra”. De hecho, indica que “nunca miramos las clasificaciones para analizar al rival, sino las virtudes y los posibles defectos”. Señala que el grupo está centrado en lo suyo, no se distrae de un “entorno” muy exigente que “vive de cuando el CD Logroñés estaba en Primera” y que “los pensamientos de la gente desde fuera ni puedo ni debo entrar. No hay enemigo pequeño y hay que ser muy respetuoso con todos”.
Evidentemente, el triunfo en Villaviciosa ha fortalecido las ilusiones de los blanquirrojos, pero como expone el técnico vasco, entre lesiones (Edu Payá, Julio rico, que ha recaído de sus molestias, Santelices y Jordan) y sanciones (Jacobo e Íker Alegre) “no se puede repetir el once”. Un aspecto que no preocupa porque “tengo plena confianza en los jugadores que tenemos” y que además “no tiene que servir de disculpa”. En este sentido, el aspecto positivo va a ser que Chevi y Carlos Fernández regresan a la convocatoria una vez superados sus problemas de hombro y musculares, respectivamente.
En esta línea, Miguel será el portero. Miguel Santos, que andaba con sobrecargas, forzará para ser lateral diestro. Borja y Adrián León ejercerán de centrales, mientras que Paredes será el lateral zurdo. Es probable que Pouso repita la misma medular que contra el Lealtad, es decir, Birane Ba, Muneta y Pere Milla. En los costados estarán Titi y Joel Valencia, mientras que en la delantera podría reaparecer Carlos Fernández, reubicar a Pere Milla -entraría Chevi en el once- o repetir con Álvaro González para aportar velocidad. Sea como fuera, seguro que cualquier posibilidad será la adecuada para regresar a Logroño con los 3 puntos. El triunfo y un posible tropiezo del Racing de Ferrol -próximo rival en Las Gaunas- podría poner en juego el liderato el próximo domingo. Paso a paso, lo primero, ganar a un colista que presentará batalla.