Los miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas ya tienen en sus manos el informe elaborado por la Comisión de investigación sobre los ataques realizados en diciembre y enero, por parte de Israel a la franja de Gaza.
Estos ataques, que fueron muy criticados por la sociedad internacional y que no recibieron respuesta de los organismos internacionales, causaron seis casos de muertes, heridas y daños relacionados con la ONU y pérdidas en sus instalaciones superiores a los 10 millones de dólares.
El informe, que ha sido presentado por el Secretario General, Ban Ki-moon, también confirma que las fuerzas israelies utilizaron fósforo blanco en sus ataques a Gaza. Esta sustancia causa unas graves quemaduras que pueden llegar hasta los huesos y contamina órganos vitales del cuerpo, es decir, una sentencia segura de muerte.
Sin embargo, la Comisión con dicho informe se limita a aconsejar a Naciones Unidas que reclame a Israel una compensación por los daños sufridos y asegurar la protección del personal internacional, pero no pretende juzgar ni anima a tomar acciones legales contra el Estado israelí.
Por su parte, Israel ha declarado a través de su Ministerio de Asuntos Exteriores que este informe es “tendencioso, claramente sesgado e ignora los hechos presentados ante el Comité”.