La Policía Federal mexicana ha encontrado varias nóminas pertenecientes al crimen organizado que demuestran que se está sobornando a la policía municipal del país. Según ha declarado Genaro García Luna, secretario de Seguridad Pública de México, se estarían pagando 1.277 millones de pesos anuales (15.000 millones al año, lo que equivale aproximadamente a 889 millones de euros), en concepto de sobornos.
La explicación para que tantos policías (se estima que 165.510 miembros de la seguridad municipal) acepten los sobornos sería, según dijo García Luna en el Foro Internacional Hacia un Modelo Policial para el México del Siglo XXI, el déficit salarial. De estos policías, el 40,5% estaría ganando entre 1.000 y 4.000 pesos al mes (es decir, entre 59 y 237 euros), y el 20,4% recibiría menos de 1.000 pesos mensuales.
El narcotráfico, por su parte, dotaría a cada agente de 4.000 a 5.000 pesos al mes (entre 237 y 296 euros). “El déficit salarial de los policías municipales es de 1.277,27 millones de pesos mensuales [...]. Eso no lo pagamos y eso es igual a corrupción”, señaló García Luna, quien también indicó que este tipo de sobornos se producen en todo el país. Si las autoridades pagaran estas cantidades que paga el narcotráfico, se le permitiría a los policías llevar una vida digna, según se indicó en este Foro Internacional.
Pero el problema también reside en el control que ejercen las autoridades sobre las actividades de corrupción y soborno. Tal como indicó García Luna, el soborno tendría también su origen en las autoridades locales, como los alcaldes, que no se encargarían de vigilarlo adecuadamente. Además, por otra parte, la escasez de policías dedicadas a perseguir los delitos en todo México, apenas un 6.3% del total de fuerzas del Estado (26.928 efectivos), también influiría en este fenómeno.
Legalizar las drogas para acabar con el narcotráfico
Por su parte, el ex presidente mexicano Vicente Fox, ha propuesto que se legalicen las drogas para así acabar con el crimen organizado originado por el narcotráfico. Según escribió Fox en su blog, la legalización de “la producción, la venta y la distribución de las drogas” serviría para “golpear y romper la estructura económica” de los cárteles.
Esta propuesta contrasta con la idea del actual presidente, Felipe Calderón, quien desde que llegó al poder en 2006, puso en marcha un plan para luchar contra el narcotráfico que incluía la actuación incluso del Ejército.
La idea de Fox tiene en cuenta que la legalización de las drogas no debería ir acompañada de un aumento de su consumo. El ex presidente se ampara en el ejemplo de otros países donde se han legalizado y donde “no se ha elevado el consumo significativamente”. La lucha contra el consumo se llevaría a cabo también a través de “altísimas tasas impositivas”, y de fondos destinados a “atacar la adicción, la reducción del consumo y la rehabilitación y salud de la población”.