El estanque de residuos de la polémica refinería de aluminio que la empresa Vedanta Resources tiene en Orissa, en el este de la India, ha filtrado un vertido de fango tóxico según se desprende de informes locales.
Según dichas informaciones, el vertido tóxico se filtró por una grieta en el muro de retención y acabó en los arroyos cercanos. Pasaron varias horas antes de que el personal de Vedanta consiguiera frenar el flujo. Un hombre de la comunidad declaró que los peces comenzaron a morir quince minutos después de que el fango se mezclara con el agua.
Vedanta niega la existencia de la fuga, y atribuye el fango rojo a la mezcla de la “tierra para la construcción” con agua de lluvia cerca del embalse. Un periodista local asegura que el personal de seguridad de Vedanta intentó impedir que alguien filmara o fotografiara lo sucedido.
Algunos miembros del pueblo indígena majhi kondh viven alrededor de la refinería de aluminio de Vedanta. Más de cien familias perdieron sus hogares cuando se construyó la refinería, mientras que otras muchas perdieron sus tierras de labranza.
La refinería de aluminio saltó a los titulares el año pasado cuando el cercano pueblo indígena dongria kondh lideró una exitosa campaña internacional para paralizar el proyecto minero asociado que los hubiera destruido.
En agosto del año pasado, el ministerio de Medio Ambiente de la India bloqueó los planes de Vedanta para la construcción de la mina y de la refinería, citando su “desprecio total por la ley”. Vedanta y la Orissa Mining Corporation han apelado en los tribunales de la India para revocar dichas prohibiciones.
El vertido ha recordado a la tragedia del pasado año en Hungría, donde varias personas murieron y más de cien resultaron heridas cuando un estanque de fango rojo se desplomó.