Hasta 2013, explica el regionalista, las compañías aseguradoras tenían su cobertura sanitaria en los hospitales públicos, fundamentalmente en el San Pedro, de forma que estas aseguradoras pagaban a la sanidad pública una cantidad económica, “lo que se convertía en una importante fuente de ingreso para la sanidad pública riojana”. En concreto, Gil Trincado calcula que estas cantidades rondaban los “tres millones de euros”. Ingresos que ya no llegan a la sanidad pública desde que en 2013 “el Gobierno regional decide desviar lo que en el argot sanitario se conoce como 'los tráficos' al Los Manzanos”.
Una orden que llega del Gobierno regional “por escrito” y que obliga a derivar “directamente a Los Manzanos traumatismos de extremidades superiores o inferiores sin fractura abierta, esguinces cervicales, contusiones, quemaduras y abrasiones leves… También se puede derivar a Los Manzanos traumatismos para control y reposo sin indicación quirúrgica, traumatismos faciales, fracturas de cadera o extremidades quirúrgicas así como cirugías traumatológica de niños de más de 5 años y 20 kilos de peso”.
Sin embargo, y según el mismo documento, se tratará en el Hospital Público, Hospital San Pedro /Fundación Hospital de Calahorra las fracturas abiertas de cualquier localización; los traumatismos craneoencefálicos; lesiones vertebrales con afección (o sospecha) de cordón medular; patologías oftalmológicas; pacientes embarazadas y niños con patología quirúrgica con menos de 20 kilos de peso, especifica la orden aportada por el diputado del PR+.
Es decir, explica Gil Trincado, “a Los Manzanos derivamos lo fácil y todo aquello que tiene una sencilla facturación y cobro mientras que las intervenciones más complicadas van al San Pedro, dejando claro cuál es el Hospital de referencia y quién es otra cosa muy distinta”. Una discriminación del Gobierno regional que “ha provocado una caída espectacular de ingresos que han ido a parar a la privada porque la sanidad pública ha perdido por esta derivación intencionada dos millones de euros”.
En 2013, explica Gil Trincado, “se habían presupuestado unos ingresos de 3,1 millones de euros pero finalmente se ingresaron 2,1”. Y en 2014, apunta, “el Ejecutivo regional rebajó los ingresos después de derivar a las compañías a Los Manzanos hasta los 2,5 millones de euros pero la recaudación por prestaciones de asistencia sanitaria se vuelve a desplomar y no llegará a los 2 millones, un 20% menos”.
Un “escándalo de primera magnitud” que ha llevado al PR+ a exigir al Gobierno regional las razones “por las que el Gobierno de La Rioja ha dado esta orden por escrito para desviar compañías aseguradoras y sus pacientes a una empresa privada y las razones por las que, cada año, se pierde un millón de euros por este motivo”.