La Unión de Agricultores y Ganaderos de La Rioja no se va a sumar a la movilización convocada para el próximo 2 de marzo al entender que “los problemas que atraviesa el campo hay que resolverlos a escala estatal e incluso europea”, como ha defendido en un comunicado.
La UAGR ha explicado que está trabajando con su Coordinadora estatal COAG “para proponer medidas y buscar soluciones a los graves problemas que sufre el sector agrario, tanto riojano, como español”. Una situación“ que las Organizaciones Profesionales Agrarias llevaban afrontando en unidad de acción desde finales de 2019, unión del campo comandada desde las organizaciones estatales”.
Fruto de esta unidad de acción, han contextualizado, fueron las movilizaciones de principios de 2020, en La Rioja con una concentración en Logroño el día 29 de enero. La pandemia obligó a cesar las movilizaciones, que se retomaron el año pasado con una manifestación-tractorada en Logroño, el 26 de enero, y una manifestación en Madrid, el 20 de marzo.
En esta ocasión, “se ha decidido convocar unilateralmente una movilización para el próximo 2 de marzo, sin dar tiempo para un consenso previo entre organizaciones, y sin el respaldo de una campaña estatal”.
Para Óscar Salazar, presidente de la UAGR-COAG, “una manifestación sin una estrategia clara nacional no va a servir para aliviar los problemas que tenemos hoy los agricultores y los ganaderos. Es importante reivindicar en unidad de acción asuntos tan importantes como la rentabilidad del sector agrario o la minimización de los efectos de la reforma de la PAC, pero con la convocatoria unilateral se nos ha cerrado esta posibilidad”.
La UAGR recuerda que este mismo mes denunció públicamente la situación del sector apícola, dentro de una campaña impulsada por COAG. “Vamos a seguir con reivindicaciones sectoriales -señala Óscar Salazar-, por ejemplo, en el sector vitivinícola. Vamos a hablar con el resto de organizaciones del sector productor con representación en la DOC Rioja para, si no revierte la situación a corto plazo, planificar un calendario de acciones. Propondremos que tengan lugar ante el Consejo Regulador y ante las grandes bodegas. No podemos consentir que muchos viticultores acumulen cuatro campañas cobrando por debajo de los costes de producción. Y lo mismo haremos con el resto de los sectores, afectados por el aumento de los costes de producción en los últimos tiempos”.