Los altos índices de violencia e inseguridad en México tienen un fuerte impacto sobre la economía del país, que rondaría el 1,2% del PIB mexicano, tal como han indicado el secretario de Hacienda de México, Ernesto Cordero. En este sentido, los recursos que se pierden por la lucha contra el narcotráfico y la delincuencia organizada representan 154 mil millones de pesos, según estimaciones del diario mexicano El Universal.
En este sentido, la principal preocupación por parte de los funcionarios del Gobierno, empresarios y académicos mexicanos es el impacto que estos índices de violencia pueden causar en los inversores extranjeros.
Siguiendo esta línea, Cordero quiso dejar claro en una rueda de prensa que la violencia “tiene un impacto tanto para el Gobierno y tiene un impacto para las empresas”, y agregó “tiene un impacto en términos de costes adicionales para las compañías, por eso es tan importante luchar contra el crimen organizado en México de una manera efectiva y oportuna”.
Por otro lado, desde que Felipe Calderón asumió la presidencia mexicana, en 2006, la cifra de muertes por violencia asociada al narcotráfico es de unas 28.000 personas. Esta situación, además, obliga al gobierno a destinar más recursos en lo que se refiere a seguridad en un intento de combatir a los cárteles.
El secretario de Hacienda quiso reiterar que las previsiones de crecimiento del Gobierno de México, para este año, se mantienen entre el 4 y 5% del PIB, pese a que en 2009 la economía del país se contrajo un 6,5% a causa de la crisis.
Nuevo caso de secuestro de inmigrantes
En este sentido, otro caso que pone de manifiesto la violencia que vive el país es el de la ciudad mexicana de Tijuana, fronteriza con los Estados Unidos, donde permanecen secuestrados 15 inmigrantes a la espera de que sus familias paguen el rescate. El suceso ha sido conocido por el único liberado que permaneció en cautiverio desde el pasado 21 de agosto y que ha denunciado el caso tras ser puesto en libertad.
El testigo ha informado que los secuestradores se hicieron pasar por “coyotes” (nombre con el que se conoce a los traficantes de inmigrantes irregulares en este país) para ayudarle en su paso a Estados Unidos. Tras lo cual le llevaron a un domicilio y una vez que le inmovilizaron solicitaron un rescate de 500 dólares a un familiar que lo pago y el rehén fue liberado el pasado 31 de agosto.
José Varela, miembro de la Policía Municipal, declaró al a cadena de noticias CNN “podemos confirmar que su familia pagó un rescate por su libertad y después acudió a nosotros y nos dijo que hay otros secuestrados en Tijuana”.
La Policía Municipal ya ha pasado el caso al Ministerio Público, aunque no ha habido confirmación por parte de la Fiscalía de haberlo recibido.