Derrota. Una más. Ya no hace ni daño. Son nueve, se dice pronto, en diez jornadas. Demasiadas. Hay que cambiar la dinámica porque esto tiene mala pinta y además los errores persisten. El otro en el Palacio día fue el segundo cuarto, este sábado el arranque del tercer cuarto. Son parciales demoledores, imposibles de contrarrestar tal y como está jugando este Calzados Robusta. Da igual mostrarse sólido en defensa y consistente en ataque durante veinte minutos. Llega un momento en el que el equipo se desconecta y lo acaba pagando en modo de derrota.
El Araberri supo hacer su trabajo, tirar de su quinteto titular y esperar el momento en el que dar la puntilla. Lo hizo con un 17-2 de salida en el segundo tiempo. Los de Antonio Pérez intentaron remediarlo, pero tras el 57-40 cualquier reacción, hubo una tímida de 3-8, fue estéril para un grupo tocado en el aspecto anímico y que no encuentra la manera de ser constante en sus acciones. Por si fuera poco, como ya aconteciera en el último duelo disputado en casa, el equipo, en cuanto se vio con 20 puntos por debajo en el marcador, no peleó, se dejó ir, bajó los brazos y confío en acabar cuanto antes. 87 puntos en contra, otro día más sin hacer los deberes.
El problema es que así, si no se va día a día en el trabajo, es complicado aprobar. Las expectativas creadas provocan que ser colista se vea aún más como un fracaso. Cierto que hay tiempo para revertir la situación, pero la defensa, en estos momento, no invita al optimismo. Dio igual estar acertado desde el triple, 48% con diez anotados, porque en baloncesto la suma de todas las cosas hacen el todo. El trabajo grupal que tanto le gusta a Antonio Pérez no aparece. Marko Popadic no estaba a gusto con su participación y tomó el camino fácil, solicitar la baja.
BUEN COMIENZO
El caso es que el Clavijo comenzó sin miedos y atinando desde fuera con 4 de 5 triples. Galarreta, Garrido y Bonifant asumían el protagonismo y le daban la máxima ventaja visitante, 8-14, minuto 3. Araberri, también desde el perímetro, entró Araberri en el partido para tomar una rentas pequeñas durante en la primera mitad. Con Berhanemeskel (14 puntos al descanso y 4 triples) como amenaza el juego era igualado a expensas de que pasara algo, que uno de los dos flojeara.
Martín y Tunde, saliendo desde el banquillo, animaban a los suyos. El base hacía jugar a los suyos, mientras que por dentro el nigeriano y Laso se hacían fuertes en ambos lados de la pista. El 23-21 había que darlo por bueno, se estaba ahí. Igual que el 40-38 a descanso después de dos buenas acciones consecutivas, un mate de Tunde y una gran defensa que impedía lanzar al cuadro local.
Berhanemeskel y Hearst lanzaban a los vitorianos con un 7-0 de salida (47-38) que fueron el punto y final de los riojanos. Con 9 puntos abajo aparecieron las precipitaciones, las malas decisiones y los desajustes atrás para encajar un determinante 17-2 que dejó el partido franco para Araberri. Se estaba fuera. Bravo, tirando de los suyos, invitó a sus compañeros a que le siguieran. Laso y Galarreta ayudaron y parecía que las nubes negras pasaban a grises con diez minutos para el final, 58-50.
IMPOSIBLE RECOMPONERSE
Fue un espejismo. Otro parcial de 10-0 finiquitó la contienda. De nuevo, la fragilidad defensiva condenó a un Clavijo inconsistente. Cvetinovic y Hearst dejaban un 68-50 imposible de remontar. Más para un cuadro visitante que se olvidó del grupo y apeló al carácter individual de algunos de sus jugadores, ya que la ida y la vuelta en los instantes finales favorecía a los vitorianos. El 87-71 permite a un recién ascendido
En los momentos complicados, como el actual, es cuando debe verse la implicación de todos. Algunos deben dar un paso adelante, otros ya lo hacen pero es insuficiente. Dar con la tecla, refrescar el ambiente puede ser sano. Claro que una cosa es entrenar y otra competir, ahí, por ahora, está dejando mucho que desear este Calzados Robusta que continúa colista y que afronta el choque ante el filial del Barcelona com una final. Demasiado pronto se empieza a vivir cada jornada con tanta angustia, presión y exigencia de triunfos. Es lo que se ha buscado este Clavijo.
FICHA TÉCNICA
Sáenz Horeca Araberri: Papantoniou (14), Berhanemeskel (20), Hearst (19), Cvetinovic (20) y Rowley (4), cinco inicial, Alvarado (1), Iván García (2), Andrés, Buesa (3), López y Lorenzo (4)
Calzados Robusta: Garrido (5), Bravo (13), Galarreta (16), Bonifant (11) y Gerun (4), cinco inicial, Tunde (11), Norris (2), Álex Reyes, Alberto Martín (2) y Laso (8).
Parciales: 23-21, 17-17 (40-38 al descanso), 18-12 (58-50) y 29-21 (87-71 al final).
Árbitros: Francisco José Zafra Guerra y Cristian José García Rodríguez. Eliminado por faltas personales el visitante Bonifant.