Nadie quiso faltar a la cita con Azcona: exalcaldes, concejales, directores generales, periodistas, empresarios, gente de la cultura y de la universidad... lo más granado de la sociedad logroñesa arropó a su riojano más cinematográfico; Rafael Azcona, a la película que José Luis García Sánchez.
La película rodada en Logroño y en la que también ha participado muchos ciudadanos como extras de la ciudad, se titula 'Los muertos no se tocan, nene' y está basada en la novela homónima de Azcona en la que refleja de manera autobiográfica el despertar sexual de un adolescente, Fabiancito, durante los últimos años de la década de los 50 en una ciudad de provincias que es Logroño.
Filmada en blanco y negro, 'Los muertos no se tocan, nene' es un sainete de personajes, de arquetipos de una sociedad cerrada y gris en la que la muerte convive con toda naturalidad con la vida. El bisabuelo, Fabián, deja este mundo rodeado de una familia particular, que discute y se ríe, obsesionada por las apariencias y la ascensión social.
A las 20.00 horas comenzaba el estreno de la película en los cines Moderno de Logroño. No cabía ni un alfiler, incluso había gente sentada en las escaleras de la sala. Bernardo Sánchez, profesor universitario riojano y guionista también del film, presentó el estreno y al equipo de la película, compuesto por su director José Luis García Sánchez y los actores; Silvia Marsó, Carlos Iglesias, Mariola Fuentes y Tina Sainz.
'Los muertos no se tocan, nene' completan la trilogía del guionista nacido en la Avenida de Navarra de Logroño, junto con 'El Pisito' y 'El cochecito'.