La Junta de Gobierno ha aprobado aceptar la solicitud formulada por la mercantil Ruavi 2016, SL como nueva adjudicataria del contrato de colaboración en la promoción de viviendas y enajenación de parcelas adscritas al patrimonio municipal del suelo en el PERI Mercaderes.
La subrogación de este contrato supone el traspaso de la totalidad de los derechos y obligaciones establecidos en la licitación inicial y, por tanto, el abono de una subvención pendiente de casi 150.000 euros que se hará efectiva con la aportación del certificado final de obra y la obtención de la licencia de primera ocupación del inmueble.
La actuación consiste en las obras de adaptación de las singularidades arquitectónicas y la rehabilitación de los edificios de la calle Ruavieja 22 y 24, “donde se construye un hotel en edificios de la época medieval que cuentan con la protección máxima que prevé el Plan General Municipal”, ha explicado el portavoz del Equipo de Gobierno, Miguel Sainz.
Sainz ha recordado que se trata de una actuación urbanística, larga en su tramitación, en el que el PERI (Plan Especial de Reforma Interior) que incluía toda la manzana fue aprobado por el Pleno el 29 de julio de 1999, y que estuvo precedido de los estudios históricos y arqueológicos realizados los años anteriores. Posteriormente se realizaron modificaciones del PERI para delimitar las unidades conforme a las que programar su ejecución.
Uno de los edificios incluidos en el este PERI es el situado en la calle Marqués de San Nicolás, 46, cuyo proyecto fue redactado desde la Oficina Municipal de Rehabilitación y fue construido por promoción directa del Ayuntamiento de Logroño; edificio en el que desde el año 2005 tiene su Sede la Universidad Popular de Logroño.
La construcción de otra parte de los edificios se adjudicó por concurso a COMSA en el año 2004, pero las obras se retrasaron hasta 2008 debido a diversas vicisitudes derivadas de la aparición de restos arqueológicos y de las propias características de los edificios. Cuando el hotel estaba próximo a su finalización, la empresa Comsa sufrió problemas económicos que obligaron a paralizar el plan Mercaderes en 2013.
“Ahora la situación se ha desbloqueado -ha señalado el portavoz- y, superada la anterior coyuntura económica, este proyecto va a contribuir a potenciar esta zona histórica de la ciudad, tanto desde el punto de vista arquitectónico como turístico”.
La nueva adjudicataria, además, ha adquirido los edificios de Marqués de San Nicolás 48-50-52, que lindan con el hotel de Ruavieja por un patio interior, que permitirían la ampliación de los servicios del hotel.