La nueva ordenanza reguladora de las instalación de quioscos y terrazas de veladores de la ciudad de Logroño, se someterá a votación en el Pleno del próximo 7 de mayo con la finalidad de entrar en vigor a mediados de julio.
Las zonas ordenadas para la instalación de terrazas afecta a las plazas del Mercado, Parlamento, Primero de Mayo, San Agustín, Fermín Gurbindo y Luis Braille. Quedan fuera de este proceso Gran Vía, aunque está previsto su ordenación, y Portales.
La nueva ordenanza prevé delimitar el espacio de las terrazas de la ciudad, al tiempo que su horario se reduce en dos horas los días laborales al obligar a su cierra a partir de las doce de la noche. Así lo comunicaron ayer el portavoz del Gobierno municipal, Vicente Urquía, y el concejal de Movilidad, Domingo Dorado, quienes expusieron las características de esta nueva ordenanza un día después de que el Ayuntamiento se reuniese con la Asociación Restauradores y Afines de la FER.
UNA ORDENANZA MODERNA Y PRÁCTICAEn palabras de Urquía se trata de la ordenanza “más moderna de España”, esta
modernización no se realizaba desde el pasado 2001, y para el Equipo de Gobierno Municipal la necesidad del cambio reside en que “las terrazas crean un modelo de ciudad aceptable” y “son un bien añadido para todos los ciudadanos”.
El concejal de Movilidad, Domingo Dorado, considera que la ordenanza favorece a “que las terrazas no molesten a los viandantes” y añade que se instalará pavimento lateral en terrazas de paso longitudinal en aras de la accesibilidad con los invidentes.
Sobre los cerramientos, se permitirá cerramientos estables a tres caras “tipo europeo”, terrazas con pavimentos laterales y cerradas con cuatro caras, en el caso de éstas se precisará una concesión individualizada como los quioscos de prensa de la ciudad, ya que las terrazas de este tipo tienen más “problemas estéticos”.
En comparación con la Ordenanza de Terrazas anterior la nueva “es más práctica” e “intenta favorecer a los hosteleros”, aseguran desde el Ayuntamiento. En este sentido se podrá desplazar mobiliario a favor de las terrazas, se autoriza su permanencia en la calle por la noche, o se mejoran las distancias en paradas de autobús, taxis o aparcamiento para discapacitados. Como novedad, se tendrá en cuenta la distancia con el carril bici, cabinas o quioscos de la ONCE, y la instalación de calefactores para ampliar la permanencia de las terrazas con el mal tiempo.
Se legalizan las barricas y las mesas altas en la Calle Laurel o San Juan, se disminuye la publicidad de las terrazas, y prohibe los “colores chillones” que no resultan estéticos para la ciudad.
LOS HORARIOS, EL PUNTO DE MIRAEl punto más conflictivo
, aseguran desde el Consistorio logroñés ,es el horario de cierre entre semana. Además, las sanciones en este sentido se modifican, explica Domingo Dorado que “cuando antes una terraza emitía más ruido de lo permitido se suprimía el número de mesas, ahora se suprime el horario de cierra con una hora menos”.Francisco Martínez
Bergues
Presidente de la Asociación de Restauradores y Afines de la FEREn declaraciones para Rioja2, el presidente de la asociación de la FER afirma que
“no es lo que quisiéramos nosotros, como es lógico, pero la consideramos buena”. Para el sector hostelero, añade, lo reseñable es que se haya contado con los hosteleros a la hora de redactar el reglamento.
“LOS PUNTOS DE FRICCIÓN SON MÍNIMOS”
Uno de los mayores inconvenientes que encuentran los hosteleros es la reducción en dos horas los días laborales porque: “el verano”, asegura Bergues “es verano, y la gente sale más de noche”. Por lo tanto se confirma que los horarios son uno de los puntos de discordia entre el Consistorio y los hosteleros, y tal vez sea una de las alegaciones que realizarán durante los próximo 30 días, asegura el presidente.
Francisco Martínez Bergues: “Para nosotros no es perfecta, pero para el ciudadano que tiene una terraza debajo de su casa, tampoco lo es”.
Bergues afirma que no hay tantas discrepancias como en la ordenanza de ruidos que “es mucho más conflictiva y complicada”. Uno de los puntos positivos, asegura, es la permanencia del mobiliario en la calles durante las noches, y el tema del “papeleo”, ya que con la nueva ordenanza se facilitan los trámites.
Ante la pregunta: ¿La nueva ordenanza favorece al hostelero? el presidente de la Asociación reitera que se trata de “un tira y afloja con el Ayuntamiento” ya que les favorece en una parte, pero en otras les perjudica. Las sanciones de los ruidos en las terrazas es otro de los puntos conflictivos de la ordenanza, el presidente asegura que “a los ruidosos se les dirá que bajen la voz y si no hacen caso tendremos que avisar a la Policía” pero añade “los hosteleros dependemos de la educación cívica de la gente”.
Jorge Manuel HernándezPropietario hostelero de Logroño
“No me parece mal, pero no creo que sea el mejor momento para sacar la ordenanza”. Así de rotundo se muestra este propietario de un local de la plaza del Parlamento de Logroño.
Sobre la reducción de dos horas en el horario durante la semana, afirma que le parece “comprensible”, aunque para él la reducción de horas “supone ingresos” y afirma que “nosostros alegaríamos el jueves hasta la 1:00 horas de la mañana”.
La terraza de la que es propietario ya había pactado con el Ayuntamiento de Logroño la reducción de mesas de domingo a miércoles (10 mesas) a partir de las 22:00 horas de la noche, y jueves, viernes y sábado mantenía las 15 mesas permitidas en la zona.
Por esta razón la nueva ordenanza le parece “ambigua” y pide que el Ayuntamiento tenga en cuenta valores como la igualdad de toda la hostelería de la ciudad, ya que considera que “la hostelería la disfruta todo el mundo” y es preciso que el trato sea para todos igual, porque “no estamos para tirar cohetes”.