Logroño es Ciudad Educadora y a la vez destina recursos públicos para facilitar el acceso de menores a corridas de toros. Así lo denuncia la Fundación Franz Weber quien censura además que Logroño esté adherido a esta red estatal a la vez que consiente ofertas a menores “vulnerando sus derechos”.
Y es que mientras la Carta de Ciudades Educadoras habla de la responsabilidad de las administraciones “de educar y transformar la ciudad en un espacio de respeto a la vida y la diversidad”, Logroño “avala promociones dirigidas a niñas y niños para contemplar un acto de violencia explícita, como los precios superpopulares dirigidos a menores de 18 para la próxima feria taurina”.
Este documento menciona de forma específica a estos grupos poblacionales al señalar que “la garantía de los derechos de la infancia, la adolescencia y la juventud en la ciudad consiste, en primer lugar, en asegurar de manera plena su condición de protagonistas de su vida y del desarrollo de sus derechos civiles y políticos”.
El Comité de los Derechos del Niño (CDN) en las advertencias realizadas a España en 2018 vino a recordar que el interés superior es protegerlo de la violencia, algo que en Logroño no se cumple con este tipo de políticas.
De este modo los naturalistas advierten al municipio que su reconocimiento se queda en mera retórica mientras azuce la presencia de menores en los tendidos para que contemplen, “en directo, el sufrimiento ejercido sobre animales e incluso las cogidas sobre los participantes”. Estos grupos poblacionales quedan expuestos así “a un espacio que ni respeta la vida, tanto de animales como de participantes, ni su integridad, al tener una afectación potencial sobre su desarrollo psicosocial y de la personalidad”, concluyen