Cambia Logroño exige al Ayuntamiento de Logroño “un plan de choque para hacer frente al exilio de jóvenes”. El portavoz de esta formación, Gonzalo Peña, junto a la concejala Paz Manso de Zúñiga calculan que “entre 2006 y 2016, 10.000 jóvenes se han ido de Logroño” y denuncian que “la ciudad se está quedando sin capacidad productiva y reproductiva”.
De hecho aseguran que estas cifras ponen en evidencia “un problema de modelo ya que se está desguezando el empleo, y de uno fijo y estable se crean tres precarios”, asevera Peña.
Por su parte, Manzo de Zúñiga, rechaza que “encima se criminalice a los jóvenes llamándoles NINIS, cuando el aumento de las tasas les impide estudiar y la falta de trabajo tener un empelo. No va a haber futuro sin inversión en juventud y educación”, asevera.
Por todo ello, desde Cambia Logroño proponen crear un paquete de cuatro medidas “que incluya ayudas para la emancipación, la rehabilitación, empleos sociales y públicos”. Y es que, detalla, “no hay ayudas municipales para la emancipación”, por lo que se pregunta “qué expectativas pueden tener los jóvenes”. Asimismo considera necesario, “extender las ayudas a la rehabilitación a otras zonas de la ciudad, además del Casco Antiguo”.
Y es que, recuerda que “hay 17.000 viviendas vacías en Logroño por lo que es necesario apostar por la rehabilitación”. Algo que, según ha dicho, “ayudaría a recuperar los empleos que se rompieron tras la burbuja inmobiliaria”.
En cuanto al empleo público, la concejal de Cambia Logroño recuerda que “existen carencias de personal en distintas unidades”. Es el caso de las “ayudas de emergencia social se están retrasando tres meses por falta de personal”.